sexta-feira, 1 de junho de 2018

Nefilim

Los nefilim o nephilim (en idioma hebreo “Néfilim”, en plural, que viene de nafál: "caer", y de ahí “los caídos” o “los que hacen caer") son seres que se mencionan varias veces en la Biblia. Según el Génesis serían los descendientes de los «hijos de Dios» (ángeles que dejaron sus puestos en el cielo o más bien rebeldes) y las «hijas de los hombres» (raza humana) que vivían antes del diluvio (Génesis 6:4). Se usa el mismo nombre para referirse a unos gigantes que habitaban en Canaán en el momento de la conquista israelita que precisamente no son los mismos (13,33). La Septuaginta traduce esta expresión como γίγαντες (gigantes) y la Vulgata como «gigantes».

Existe una explicación alternativa. Los creyentes, los que creían en la esperanza de la promesa de Dios (Génesis 3:15 «... Él te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar») se casaron con mujeres y su descendencia fue una raza inicua (alterando el propósito de Dios). Por eso en el siguiente versículo (Génesis 6:5) dice «Y el SEÑOR vio que era mucha la maldad de los hombres en la tierra.» Por otro lado, el término nefilim significa “los descendidos”, o “los que hacen caer”.

Por el significado del término "Caídos", Los Nefilim no pudieron de ningún modo ser hombres; más bien eran ángeles caídos o demonios. Otra razón para considerarlos ángeles caídos, y no seres humanos, es que las mujeres que copularon con ellos dieron a luz a gigantes. Lo cual no habría ocurrido si dicha unión hubiese sido entre hombres justos y mujeres impías. Como consecuencia, la Tierra se llenó de maldad y violencia. Hecho que causó la maldición de Dios, quien apesadumbrado, envió un diluvio como castigo.

En algunas religiones cristianas se niega la existencia de los nefilim.

Descripción
Nefilim en los textos bíblicos
Según la traducción, el término nefilim o neofits se ha traducido variadamente por "gigantes", "titanes" o aún se ha dejado transliterado en el original hebreo.

Para unos, los Nefilim serían ángeles caídos (nafal: caer), según esto serían los "hijos de los dioses" (בני האלהים, bnei ha'Elohim) mencionados en Génesis 6:2 y 4. Efectivamente en la Biblia hebrea la expresión "Bnei haElohim" es usada varias veces como perífrasis para referirse a los ángeles, como en Job 1:6; 2:1, y de acuerdo con esto la Septuaginta traduce esta expresión, tanto en estos pasajes como en Génesis, como “Ángeles”. En la traducción del libro pseudoepigráfico de Enoch los Néfilim no son los ángeles caídos, sino gigantes violentos (nafal también puede significar: "hacer caer", "derribadores"), frutos de la unión de aquellos "ángeles caídos" con hembras humanas. La expresión "Hijo del hombre" es usada en la Biblia hebrea como perífrasis de "ser humano" (1 Samuel 15:28; Job 16:21; 25:6; 35:8; Salmo 8:4; 144:3; 146:4; Jeremías 50:40; Ezequiel 2-48; Daniel 7:13, etc.). Así, las "hijas de los hombres" (bat haAdam) estarían en contraste con los "hijos del dios". Flavio Josefo refiere a esta tradición en su libro III, 1:

"Muchos ángeles de Dios convivieron con mujeres y engendraron hijos injuriosos que despreciaban el bien, confiados en sus propias fuerzas; porque según la tradición estos hombres cometían actos similares a los de aquellos que los griegos llaman gigantes".

Algunos creen que pasajes como 1 Pedro 3:19, 20 y Judas 6 también se refieren a estos ángeles caídos, incluso que serían citas del libro de Enoch:

“En el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados, los que en otro tiempo desobedecieron, cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé, mientras se preparaba el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho, fueron salvadas por agua”.

(1 Pedro 3:19, 20).
“Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día; como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales DE LA MISMA FORMA QUE AQUELLOS, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza...”.

(Judas 1:6).
Según otra interpretación, los nefilim serían solamente una raza de gigantes sin relación alguna con los "Hijos de Dios" de Génesis 6:4. Incluso posteriormente en lengua aramea, el término Nephila pasó a referirse a la constelación de Orión por su parecido a un gigante guerrero. El texto de Génesis 6:4 presenta una lectura tal que permite suponer que se trata de tipos distintos de personas y que los gigantes existían aún antes de que los "Bnei haElohim" se unieran a las "hijas de los hombres":

"Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres".

(Génesis 6:4)
En la tradición judaica posterior, la expresión "hijos del dios" sería una perífrasis para referirse a los hombres justos que se corrompieron al unirse a las mujeres del linaje de Caín, o incluso se referiría a reyes o gobernantes que como magistrados habían actuado con arrogantes atribuciones de modo abusivo. Tanto en el ámbito judío como el cristiano, quienes rechazan la tesis de que se trate del fruto de relaciones sexuales entre hombres y ángeles se basan en que los ángeles son descritos en la Biblia como "espíritus" sin capacidad de reproducción porque no habrían sido creados por ese Dios para tal fin. Comúnmente, los cristianos citan las palabras de Jesús:

"Erráis ignorando las Escrituras y el poder de Dios. Porque en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento, sino que serán como los ángeles de Dios en el cielo."

(Mateo 22:29-30)
Pero la Biblia hebrea sí refiere casos en los que ángeles se materializaron en ocasiones y hasta tuvieron funciones biológicas corporales, comieron y bebieron con los seres humanos. (Génesis 18:8).

Nefilim en los textos apócrifos
Igualmente, los gigantes son nombrados en otros textos considerados apócrifos, tales como:

Libro de Enoc: (de la Biblia etíope); presenta una descripción más detallada sobre los gigantes bíblicos.
El diluvio universal, y como consecuencia la destrucción de toda la humanidad, fue provocada por estos seres -Libro Enoch capítulo 10:1-9-, que no habrían sido creados según los planes de Dios -Libro Enoch capítulo 10:15-16 7.cp15-, no tienen capacidad espiritual y por tanto no tienen resurrección.2​ Similarmente se trata, según otras versiones, de la descendencia de los ángeles caídos y las hijas de Caín, de donde surgió esta raza con el fin de sabotear los planes de Dios, cruzándose y contaminando la descendencia de Adán (Ne-phil'-im, significa derribadores). La palabra Refaim se interpreta también como fallecido o muerto.

Libro de los Jubileos: (de la Biblia etíope), complementa la historia presentada en el Libro de Enoc.
Los nefilim después del Diluvio
Nefilim en los textos bíblicos
Además del Génesis, el término vuelve a utilizarse para designar a una raza de gigantes en:

Números: "Cuando Moisés envió a los espías a la tierra de Canaán, regresaron con la noticia de que allí habitaban gigantes" (Num. 13:33).
Números 13:33: También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes: y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos. (Reina Valera 1909)
Deuteronomio: "Los emitas habitaron en ella antes, pueblo grande y numeroso, y alto como los hijos de Anac. Por gigantes eran ellos tenidos también, como los hijos de Anac; y los moabitas los llaman emitas. Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de nueve codos, y su anchura de cuatro codos, según el codo de un hombre". (Deuteronomio 2:10, 2:11, 3:11)
Eclesiástico: (un libro deuterocanónico) "¿Acaso, siendo joven (David), no mató a un gigante y extirpó el oprobio del pueblo, cuando lanzó una piedra con la honda y abatió la arrogancia de Goliat?" (Eclesiástico. 47:4)
Baruc: (un libro deuterocanónico) "Allí nacieron los famosos gigantes de los primeros tiempos, de gran estatura y expertos en la guerra. Pero no fue a ellos a quienes Dios eligió y les dio el camino de la ciencia; ellos perecieron por su falta de discernimiento, perecieron por su insensatez". (Baruc 3:26, 3:27,3:28)
Libro de la Sabiduría: (un libro Deuterocanónico de la Biblia) "Así también, al comienzo, cuando murieron los orgullosos gigantes, la esperanza del mundo se refugió en una balsa (Arca de Noé) que, conducida por tu mano (Yahwéh), dejó al mundo la semilla de una nueva humanidad". (Sabiduría 14:6)

Pueblos nefilim
En la Biblia sólo un mal informe deliberadamente exagerado compara a los habitantes de Canaan a nefilim. (Números 13:33). En la Septuaginta, los Anakim (anaquitas), Refaim (refaitas), Gibborim, Zamzummim, Joel y Emim (emitas) son todos patronimios que, por ser referidos a pueblos de gran talla, se traducen por "gigantes".

Refaítas
Se habla de ellos como de una antigua tribu cananea,​ que vivía en las colinas de Judá y en la llanura filistea (Hebrón, Debir, Anab, Gaza, Gath, Ashdod).

Habitantes originales de Canaán, ocupaban el Líbano y el área del Monte Hermón, se separaron al norte de la costa de Siria y Transjordania donde construyeron una cadena de ciudades fortificadas. Vivían en la región que más tarde ocuparon los moabitas y los amonitas, los primeros les llamaron emitas, y los segundos les llamaban zomzomeos.

En la época patriarcal, el rey Quedorlaomer y sus aliados los subyugaron cuando invadieron Transjordania.5​ En la parte occidental de Palestina, se aliaron y entrecruzaron con los Caftorim, que habían venido desde Creta y se establecieron en las áreas costeras, siendo conocidos como filisteos y fenicios. En el relato bíblico en el que "Israel derrota a Og rey de Basán", se señala que luego de la campaña por diferentes territorios,

Porque únicamente Og rey de Basán había quedado del resto de los gigantes. Su cama, una cama de hierro, ¿no está en Rabá de los hijos de Amón? La longitud de ella es de 9 codos, y su anchura de 4 codos, según el codo de un hombre.

Deutoronomio 3,11
El filisteo Goliat habría sido refaíta y medía seis codos y un palmo de estatura (cerca 2,9 m), su hermano fue un gigante que se llamaba Lahmi ("de pan" o bien "de Lahmu").6​

Anaquitas
El nombre (anak = gigante) se explica en el Midrash con una indicación de que llevaban cadenas al cuello.​ Anac era hijo de un refaíta, probablemente hijo de Arba, y sus hijos fueron Sesai, Aiman y Talmai, cabezas de los clanes arameos.8​ Estos nombres parecen ser arameos, pero su significado no es claro. Los anakim fueron vencidos por Caleb.

Emitas
Cuando Yahveh da la tierra de Moab a los hijos de Lot, se dice que esa tierra había sido habitada por los emitas, "pueblo grande, numeroso y corpulento como los anaquitas" en aquellos tiempos.

Interpretación según religiones
En el judaísmo
El filósofo judío helenístico Filón de Alejandría siguió a los Setenta al comentar sobre el pasaje de Génesis 6:4

El judío Trifón se opuso a la idea de que los ángeles podían casarse.11​ El rabino Shimon bar Yojai maldijo a todos los judíos que dicen que los "hijos del dios" eran ángeles. Según la visión judía tradicional, los nefilim antes del diluvio y después del mismo fueron hombres. Esta era la opinión también de Rashi y Najmánides. Aun así, sectores más bien seculares dentro del judaísmo admiten el origen politeísta de relatos reflejados en el Génesis:

La Enciclopedia Judaica castellana define el término nefilim como: “Nefilim, ángeles caídos, identificados con los gigantes que eran progenie de los hijos del dios y de mujeres terrestres (Gen. 6:1-4). Según el Talmud, el nombre nefilim proviene de nafal (caer). Los apócrifos y seudoepígrafes, particularmente Enoc y Jubileos, contienen muchos detalles sobre los nefilim e indican como nombres de sus jefes Azazel, Semiasa y Satanael. Son maestros en magia negra, que enseñan a las mujeres y tratan de seducirlas. También son hábiles artífices”.

Esta misma enciclopedia también aplica el concepto de “Ángeles” en Génesis 6:4 como: “Hijos de Dios (Gen. 6, 4)... Las menciones más antiguas que el Pentateuco hace de los ángeles son sin duda restos de relatos de una época politeísta. Así, la unión de los hijos del dios con las hijas de los hombres en el Génesis.

Opinión de la Iglesia Ortodoxa Etíope
El Libro de Enoc forma parte del canon de la Iglesia ortodoxa etíope. En el libro, al hacer referencia a los Grigori (los padres de los nefilim según el Libro de Enoc), los describe como ángeles, y no como descendientes del linaje de Set, aunque hay controversia en este punto. También se ha dicho que uno de los propósitos del dios al inundar la Tierra en tiempos de Noé (historia del diluvio universal) fue deshacerse de los nefilim. Filón de Alejandría y Flavio Josefo aceptaron estas ideas.

La referencia bíblica acerca de Noé: "perfecto en sus generaciones" hace referencia al no contenido nefilim en su linaje (o sea 100% humano descendiente de Adán); de lo cual se infiere que, según el texto de Génesis, que no habría "hibridación" Nefilim en Noé y este sería 100% humano. Los manuscritos de la Septuaginta son problemáticos.

Referente a la Iglesia Ortodoxa Etíope, explica que Génesis 6:1 alude a ciertos seres humanos, del linaje de Set (terrcer hijo de Adán y Eva posterior al Caín asesino de Abel y luego de muerto éste, para continuar el linaje Humano hasta Noé), e interpreta el escrito Deuteronomio 14:1 Hijos sois de Yahwéh vuestro Dios; no os sajaréis, ni os raparéis a causa de muerto, como un texto que haría referencia a ellos. Según su interpretación, estos hombres habían comenzado a sentir intereses carnales, de modo que tomaron como esposas a las hijas de los hombres, las descendientes de Caín. Esto se señala, sin lugar a dudas, en la mayoría de las versiones ortodoxas de Enoch y los Aniversarios, pero también es el punto de vista presentado por textos no bíblicos más antiguos, especialmente el Segundo Libro de Adán y la Víspera.

Opinión de la Iglesia Católica
Eusebio de Cesarea,14​ Justino mártir,15​ Clemente de Alejandría, Orígenes, Tertuliano, Ireneo de Lyon y Atenágoras de Atenas identifican los "hijos del dios" con ángeles.

Sexto Julio Africano (c. 160 - c. 240) condena la opinión de que los "hijos del dios" eran ángeles, y san Agustín de Hipona, en su libro La ciudad de Dios, dio la interpretación que se sigue desde entonces en la Iglesia Católica, que enseña que la expresión "hijos del dios" en la Biblia debe utilizarse sólo para referirse a los descendientes de Set, llamados así por su amor al dios judeocristiano, mientras que los que se unieron con los gigantes serían ángeles caídos, es decir, demonios. Julio Africano y Agustín para apoyarse citan a Mateo e interpretan una frase de Jesús que dice que "los Ángeles no se casan".

La erudición moderna dentro del catolicismo se inclina por la tesis de los primeros:

La nota de la Biblia de Jünemann dice: “b. Ángeles inferiores, antropomorfos. c. Aquellas hijas superiores eran de belleza sobrehumana; de modo que aquellos semiángeles, prevaricando, decayeron de su estado, eligiendo cada cual para sí la más bella; enlace del que nació la segunda raza de gigantes y héroes; aquellos superhombres de que está llena la tradición antigua”.

El comentario de la Santa Biblia de Martín Nieto dice al pie de página en Génesis 6:1-8: “La promiscuidad de misteriosos seres celestes con las hijas de los hombres denota el alto grado de corrupción alcanzado por la humanidad. Es verosímil que el autor sagrado haya querido dejar constancia, en estas líneas, de un intento de la raza humana por conseguir una raza superior (¿gigantes, héroes, semidioses?). Tales pretensiones trastocan el orden de la creación, provocando una ruptura profunda entre el dios y los hombres”.

La nota de la Biblia “El libro del Pueblo de Dios”, declara: “1-4. EI relato bíblico retoma una leyenda popular, que habla de unos seres sobrehumanos llamados "gigantes". Antiguamente se creía que esos gigantes habían existido alguna vez sobre la tierra, y su origen se explicaba por la unión de seres celestiales (los "hijos del dios") con mujeres terrenas (las "hijas de los hombres"). Sin pronunciarse sobre la realidad histórica de este relato mitológico, el autor inspirado se vale de él para ilustrar -como podría hacerlo una parábola- la corrupción creciente de la humanidad. Esta intención aparece de manera explícita en los versículos siguientes (5-6), que expresan el pesar del dios judeocristiano por la incontenible expansión del pecado en el mundo”.

Otros prefieren explicar este pasaje como el recuerdo de excesos cometidos por reyes y magistrados de la Antigüedad. La nota de la Biblia de Nuestro Pueblo dice: “Como si se tratara de una interrupción en la lista de descendientes de Adán, nos encontramos con este relato elaborado sobre una antigua creencia en una raza especial de gigantes que, según la leyenda, provienen de la unión de los «seres celestiales», hijos del dios, con las hijas de los seres humanos. El análisis crítico de la historia que desarrollan estos capítulos enfoca ahora los comportamientos negativos de los humanos que han traído como consecuencia la aparición del mal en el mundo. Este relato, patrimonio cultural de algunos pueblos antiguos vecinos de Israel, sirve al redactor para describir otro flagelo que sufrió el pueblo, los hijos de la prostitución sagrada, práctica muy común en todo este territorio del Cercano Oriente. Los descendientes de estas uniones reclamaban unos privilegios especiales que por supuesto no tenían, pero que ellos hacían valer como legítimos, lo cual traía como consecuencia más opresión y empobrecimiento al pueblo. Este relato también puede reflejar el recuerdo doloroso de las injusticias cometidas por la familia real. Recuérdese que el rey era tenido como el «hijo de dios»; podemos suponer que sus hijos reclamaban muchos privilegios que representaban una pesada carga para el pueblo, otra actitud totalmente contraria al plan divino de justicia y de igualdad”.

En las Iglesias evangélicas
Las Iglesias protestantes están divididas respecto a estas tesis. En cuanto a la diversidad de pareceres, la nota de la Biblia Reina Valera de 1995 dice: “a 6.2 Los hijos del dios: Algunos intérpretes consideran que se trata de seres divinos o celestiales (ver Job_1:6; Job_2:1; Job_38:7; Sal_29:1; Sal_89:7); otros piensan que son hijos de la línea piadosa de Set, o de las familias gobernantes (cf. Sal_82:6). La primera interpretación toma en cuenta una creencia común entre los pueblos de la región, acerca de una raza de gigantes que habrían nacido de la unión antinatural de seres sobrenaturales con mujeres. Aunque el relato bíblico contiene aspectos oscuros, su intención es afirmar una vez más la incontenible expansión del pecado en el mundo y la corrupción creciente del género humano. Véanse 1Pe_3:20 nota m; Jud_1:6 n”.

En efecto, algunos biblistas y estudiosos se suscriben a lo propuesto por Julio Africano, por ejemplo, la nota de la Biblia de las Américas dice: “Hijos del dios. Algunos sugieren que esta expresión se refiere a seres angélicos (cp. Job 1:6; 2:1; 38:7; Sal 89:7) y que Judas 6 se refiere a este suceso, así como 1 P 3:19–20 y 2 P 2:4. Pero si los ángeles no se casan, como declara Jesús (Mt 22:29, 30), sería difícil que aquí hijos del dios se refiere a ángeles. Algunos consideran que los hijos del dios son los hijos de Set, y que las hijas de los hombres son las hijas de Caín. Así que la diferencia entre los del dios y de los hombres es una de piedad y rectitud y no de ser superhumanos o humanos”.

Por otro lado hay eruditos que se adscriben a la tradición registrada en el libro de Enoc, Justino y Eusebio. Por ejemplo, la nota de la Biblia “Dios Habla Hoy” dice: “a 6.2 Los hijos del dios: es decir, los seres divinos o celestiales como los mencionados en Job_1:6; Job_2:1; Job_38:7; Sal_29:1; Sal_89:7. Con toda probabilidad este pasaje recoge una tradición muy antigua, que los israelitas tenían en común con otros pueblos vecinos, y que se refería a una legendaria raza de gigantes. Según esa tradición, aquellos gigantes habían nacido de la unión antinatural de unos seres sobrenaturales, llamados aquí hijos del dios, con mujeres. Aunque el relato bíblico contiene muchos aspectos oscuros, su intención, en este contexto, es afirmar una vez más la incontenible expansión del pecado en el mundo y la corrupción creciente del género humano. Véanse 1Pe_3:20 nota m; Jud_1:6 n”.

La misma Versión de la Biblia dice en el comentario de 1 Pedro 3:20 y Judas 1:6: “m 3.20 Una tradición judía refería el texto de Gén_6:1-4 a los ángeles que se pervirtieron desobedeciendo al dios judeocristiano. Siguiendo el orden del relato en Gn, Pedro relaciona este episodio con el diluvio”. “h 6 2Pe_2:4. Probable alusión a Gén_6:1-4. En el libro de Henoc (véase Jud_1:14-15 n.) se escribe detalladamente sobre el castigo de los ángeles a los cuales parece referirse el citado pasaje (cf. Gén_6:2)”.

En otras religiones
El Mormonismo o "Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días" (LDS, mormones) creen que los "hijos de los dioses" (bnei Elohim) fueron humanos. Los hijos de Noé por su justicia fueron llamados "hijos del dios" y tuvieron descendencia. A diferencia del texto masorético y la Septuaginta no serían los "Hijos del dios" quienes se desposaron con las "hijas de los hombres", sino que las hijas de los "hijos del dios", siendo bellas, se desposaron con los "hijos de los hombres", llamados así porque no escuchaban al dios judeocristiano y lo habían rechazado. De estas uniones no aprobadas por ese dios nacieron los varones de renombre, no gigantes, de la antigüedad:

" Y a Noé y sus hijos escucharon al Señor, y obedecieron, y se les llamó los hijos del dios.

" Y cuando estos hombres empezaron a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas, los hijos de los hombres vieron que estas hijas eran bellas, y tomaron para sí esposas, según su elección.

" Y el Señor dijo a Noé: La hijas de tus hijos se han vendido; por lo que, he aquí, mi ira está encendida en contra de los hijos de los hombres, porque no quieren escuchar mi voz".

Por su lado, los Testigos de Jehová sostienen que los nefilim sí eran gigantes violentos, que eran hijos de ángeles rebeldes y mujeres. Interpretan, al igual que la Septuaginta, que "Bnei Elohim" solo es una perífrasis para referirse a los ángeles.

Atrahasis

Atrahasis, también Atar-hasis y Atram-hasis, es un término acadio que da nombre a un manuscrito firmado y datado por un copista llamado Kasap-aya en tiempos de Ammi-Saduqa, que reinó desde 1646 a. C. hasta 1626 a. C. Es un extenso poema que abarca desde el origen del mundo a la creación del hombre, comprendiendo la narración del Diluvio entre otras. Actualmente la copia más antigua y completa se encuentra en el Museo Británico de Londres en el salón 56 Mesopotamia, identificado como ME-78941.

La historia

La historia de Atrahasis también es conocida como Utnapishtim (para los babilonios) o Ziusudra (para los sumerios), siendo el protagonista del poema que lleva el nombre "Atrahasis", empieza mucho antes de que éste entre en escena, y antes de que el hombre fuera pensado y creado, en tiempos en que los dioses menores tenían que drenar los canales, cavar zanjas y hacer todo el trabajo pesado.

Los dioses tuvieron que drenar los ríos y limpiar los canales,
y las fronteras de la vida de la tierra,
los dioses drenaron el lecho del Tigris
y luego ellos drenaron el Éufrates.

Después de 3600 años de este trabajo, los dioses finalmente comienzan a quejarse. Deciden declararse en huelga, quemando sus instrumentos de trabajo y rodeando "la vivienda del dios principal Enlil (su templo)”. Nusku, el visir de Enlil, lo busca y lo encuentra descansando en su cama, lo alerta de la muchedumbre enfadada afuera. Estos asustan a Enlil (su cara es descrita como "cetrino como un tamarisco"). Nusku aconseja a Enlil que convoque a otros grandes dioses, sobre todo a Anu (el dios de cielo) y a Enki (el dios inteligente del Apsu). Anu aconseja que se averigüe quién es el cabecilla de la rebelión y envían a Nusku para preguntar a la muchedumbre de los dioses, cuál es su líder. Las respuestas de la muchedumbre, ¡"Cada uno de nosotros dioses ha declarado la guerra!"

¡Belit-ili la diosa madre (diosa de la matriz o diosa del útero) está presente,
Dejad a la diosa madre crear al descendiente,
y dejad al hombre llevar la carga de los dioses!

Cuando los dioses superiores ven que el trabajo de los dioses inferiores es demasiado pesado, deciden sacrificar a uno de los rebeldes, para el bien de todos. Ellos tomarán a un dios, lo matarán, y crearán a la humanidad, mezclando la carne del dios y su sangre con la arcilla. Luego, Enki les instruye sobre rituales de purificación para el primero, el séptimo y el decimoquinto día de cada mes. Los dioses sacrifican a Geshtu-E, "un dios que tenía la inteligencia" (su nombre significa (piensa) "el oído" o “la sabiduría”) y la humanidad se forma de su sangre y de arcilla. Después de que la diosa madre mezcla la arcilla, toda la tropa de dioses escupen saliva sobre ello. Entonces Enki y la diosa madre toman la arcilla en "la habitación del destino, " donde

Las diosas madres (diosas de la matriz o diosas del útero) fueron montadas.
Él (Enki) mezcló la arcilla en presencia de Ella (Belit-ili, también Ninhursag, o Aruru, o Dingirmakh, o Ninhursaga, o Ninmah, o Nintu/Antu)
Que se mantuvo recitando un conjuro,
Mientras Enki, se quedaba y presenciaba todo, él le hizo recitar.
Cuando ella hubo terminado su conjuro,
Pellizcó catorce pedazos de arcilla, y puso dos juegos,
Siete pedazos a la derecha, siete a la izquierda.
Entre ellos, ella dejó un ladrillo de fango.

La creación del hombre parece ser descrita aquí como si fuera análoga o similar al proceso de hacer ladrillos: primero el amasado de la arcilla y luego se aprietan las partes, que se harán ladrillos. Aquí, las siete partes de la derecha se hacen machos y las siete de la izquierda se hacen hembras. El ladrillo que se coloca entre los dos grupos puede ser un símbolo del feto, ya que cuando los trocitos de arcilla están listos para ser "nacidos", su nacimiento es descrito como esto:

Cuando el décimo mes vino, Ella [la diosa del nacimiento] junto a su personal, abrió la matriz.
Tal como alguien pone una espátula de madera en un horno de ladrillos, para quitar los ladrillos, la diosa de la matriz o la comadrona usa un asistente para comprobar y ver si la matriz (útero) se ha dilatado bastante para el nacimiento. Después de que los siete hombres y siete mujeres nacen, la diosa del nacimiento da reglas para que se hagan celebraciones en el nacimiento: ellos deberían durar durante nueve días en los cuales un ladrillo de fango debería ser dejado. Después de nueve días, el marido y la esposa podrían reasumir relaciones conyugales.

Al principio, la solución de los dioses con sus dificultades va bien: los hombres hacen nuevos picos y azadas, y cavan canales más grandes para alimentarse, tanto ellos, como a los dioses. Pero después de 1200 años, la población se ha reproducido tanto que Enlil tiene problemas para dormir:

El país era tan ruidoso como un toro que bramaba.
Los dioses crecían agitados y sin paz, con los disturbios ensordecedores,
Enlil también tuvo que escuchar el ruido.
Él se dirigió a los dioses superiores,
El ruido de humanidad se ha hecho demasiado grande,
pierdo el sueño con los disturbios.
Dé la orden que la -surrupu- (enfermedad) estalle.

La plaga estalla, pero Atrahasis, sabio, apela a su dios Enki para que le ayude. Este le aconseja que haga que la gente deje de rezar a sus dioses personales y comience a rezar y a ofrecer sacrificios al dios de la plaga, Namtar. Namtar se siente tan avergonzado por este espectáculo de atención que él limpia "lejos sus manos" y declara el final de la plaga.

Después de otros 1200 años, la humanidad nuevamente se ha multiplicado al punto que se violan las ordenanzas de Enlil acerca del ruido. Esta vez Enlil decide una sequía para reducir el número de habitantes, y consigue que Adad, el dios de las lluvias de los truenos, contenga las lluvias. Otra vez Atrahasis apela a Enki, y otra vez él le aconseja concentrar la adoración en un dios responsable. Adad también se siente avergonzado, y libera su lluvia.

Otros 1200 años pasan, y el ruido se hace enorme. Esta vez, Enlil quiere asegurarse que ningún dios pueda debilitar su resolución, entonces declara "un embargo general de los regalos de toda la naturaleza. Anu y Adad debían guardar el cielo, Enlil la tierra, y Enki las aguas, y ver que ningún medio de alimentación alcance a la raza humana". Además, Enlil decreta la infertilidad:"Que la matriz quede demasiado apretada para dejar (salir) al bebé fuera". Las cosas finalmente se ponen bastante mal:

Cuando el segundo año llegó, los hombres ya habían agotado lo almacenado.
Cuando el tercer año llegó, las miradas y la belleza de la gente
Fueron cambiadas por el hambre.
Cuando el cuarto año llegó, su estampa y porte habían declinado,
Sus hombros de buen semblante, se sentó con los hombros caídos,
La gente salió ante el público encorvada.
Cuando el quinto año llegó, una hija miraría a su madre;
Una madre no abriría la puerta a su hija....
Cuando el sexto año llegó
Ellos sirvieron a una hija para una comida,
Servida de un hijo para el alimento.

Aunque aquí las tablillas están rotas y el texto está fragmentado, parece que Enki frustra el plan de “hambre completo” y libera grandes cantidades de pescado para alimentar a la gente hambrienta. Enlil se pone furioso con Enki, pero la rotura está al mismo nivel del resto de los dioses, y él además va contra un plan al cual todos habían estado de acuerdo. Convencido de borrar a la humanidad de la faz de la tierra, Enlil decide dos cosas: Enki creará una inundación para borrarlos y lo forzarán a jurar para no interferir con la destrucción. ¡Enki se opone a la idea de la inundación! ("¿Por qué debería yo usar mi poder contra mi gente? …¡Esa clase de trabajo es para Enlil!"), pero al parecer, él finalmente tiene que prestar juramento.

Después de otra rotura, el texto continúa con Enki que se dirige a Atrahasis (¡todavía vivo, después de todos estos años!) para advertirle de la inundación inminente. En realidad, Enki habla a las paredes de la choza de caña de Atrahasis, para no actuar en contra de su juramento:

¡Pared, escúchame atentamente!
¡Choza de caña, asegúrate Tú, de escuchar a todas mis palabras!
Desmonta la casa, y construye un barco...
¡Que la azotea sea como el Apsu, que ni el sol pueda penetrar dentro!
Haz cubiertas1​ superiores e inferiores,
al abordar deben ser muy fuertes,
que el betún sea fuerte.

Atrahasis junta a los mayores de Shuruppak y pone una excusa para dejar la ciudad: dice que Enki y Enlil están enfadados el uno con el otro y que Enki me ha mandado que vaya al borde del agua. Cosa que hace, y allí él construye su barco y lo llena con cada tipo de animal (el texto está fragmentado aquí) y su familia. Adad comienza a tronar, y enfermo con el destino inminente ("su corazón se rompía y él vomitaba la bilis"), Atrahasis sella por encima la puerta del barco con el betún. La tormenta y la inundación resultan ser más de lo que los dioses planearon:

Como un asno salvaje que grita los vientos aullaron,
la oscuridad era total, no había ningún sol....
Como para Nintu la “Gran Amante”,
Sus labios se resecaron por la escarcha.
Los grandes dioses, los Annuna,
Estaban sedientos y hambrientos.
La diosa miró y lloró...

La gran diosa madre se queja amargamente de los defectos de Enlil y de Anu, como funcionarios con poder de decisión, y llora por los humanos muertos que "obstruyen el río como libélulas." También, "ella añoró la cerveza (en vano)." Ahora esto es la vuelta de los dioses a pasar hambre: "como la oveja, ellos sólo podrían llenar sus tráqueas del balar. / Sediento como ellos, estaban sus labios / Descargados sólo la escarcha de hambre ". Después de siete días y noches de lluvia, la inundación disminuye, Atrahasis desembarca y ofrece un sacrificio. Los dioses hambrientos huelen la fragancia y se juntan "como moscas (que) vuelan sobre el ofrecimiento". En otro pasaje mutilado del texto, la gran diosa se entusiasma y jura con un collar, con el que ella recordará la inundación. Enlil descubre el barco y está furioso, sabiendo que sólo Enki podría haber sido bastante inteligente para salir con este nuevo truco. Enki admite que él advirtió a Atrahasis, "ante el desafío" de Enlil: "Me aseguré que la vida fuera conservada". El texto está fragmentado en este punto, pero al parecer Enki persuade a Enlil de adoptar un plan más humano (menos drástico) para tratar con el problema demográfico y ruidoso. Enki y la diosa de la matriz Nintu deciden que de allí en adelante un tercio de las mujeres no dará a luz satisfactoriamente: un demonio Pasittu "arrebatará al bebé del regazo de su madre". Ellos también crean varias clases de mujeres de templo a las que no permiten tener niños.

Uttu

Uttu, en la mitología mesopotámica, fue una diosa de los tejidos y la ropa, pero antes, fue diosa de las plantas. Es hija de Enki y de Ninkurra.

Es mencionada en el Mito de Enki y Ninhursag, encontrado en tablillas de arcilla en la ciudad de Ur III, que datan de la era paleo-babilonia, según la cual su padre Enki, mediante engaños, le hace el amor. Ninhursag muy molesta, retira el semen de Enki del cuerpo de Uttu y lo planta en la tierra haciendo crecer ocho nuevas plantas. Enki las come y le provocan enfermedades.

Ninhursag


En mitología Sumeria, Ninhursag es el nombre más conocido de Ki, y era la Tierra y diosa madre que generalmente aparecía como la hermana de Enlil, pero en algunas tradiciones ella era su consorte. Posiblemente nació de la unión de An y de Nammu, o también a veces figura como hija de Kishar. En los primeros días ella fue separada del cielo (An), y sacada fuera por Enlil. Con el nombre de Antu, aparece como progenitora de la mayoría de los dioses, de los Anunaki, los Igigi y los Utukku con la asistencia de Enki produce la vida animal y vegetal.

Ninhursag significa 'Señora de las Colinas Sagradas'. Ella tiene muchos otros nombres, Ki = Tierra, Nintu = Señora del Nacimiento, Ninmah = Señora Agosto, Dingirmah, Aruru, Uriash, Belit-ili, y como la esposa de Enki era generalmente llamada Damgalnuna o Damkina . Fue principalmente una diosa de la fertilidad, en algunos himnos se la identifica como "verdadera y gran señora de los cielos" y que los reyes de Sumer "fueron nutridos por la leche de Ninhursag". La leyenda cuenta que ella creó las colinas y las montañas, y que su nombre lo cambió su hijo Ninurta, de Ninmah a Ninursag para conmemorar ese hecho.

Como Nintu es sentada, por Enki, en el sector importante de la mesa el día del banquete por la celebración de su nueva morada.

Como Ninmah, asistió a Enki en la creación de la raza humana. Ella junto a Nammu, modelaron al hombre con arcilla.

Como Belit-ili, aparece con un rol de importancia en el Atrahasis, poema épico de la creación y el diluvio universal.

En la cultura acadia ella fue Belit-ili = Señora de los dioses y Mama y como esposa de Ea, para los acadios contemporáneos de Enki, se la conocía como Damkina. Su prestigio disminuyo en la medida que aumento el de Ishtar, pero su aspecto como Damkina madre de Marduk, el dios supremo de Babilonia, le brindo un lugar seguro en el panteón.

Mito de Enki y Ninhursag
El mito de Enki y Ninhursag se relata en las tablillas que datan de la época de Ur lll y paleo-babilonia, de la antigua Mesopotamia. La historia narra como Enki bendijo la paradisíaca tierra de Dilmun. A petición de Ninsikil, Enki hizo que brotara el agua subterránea, y que navíos de Tukric y otros lugares llevaran oro y piedras preciosas a la mítica ciudad de Dilmun. Luego, el texto sigue narrando la incestuosa historia de Enki, Ninhursag y sus hijas, Ninsar, Ninkurra y Uttu. En ella, Enki tiene relaciones con sus hijas y Ninhursag se venga causándole ocho enfermedades. Más tarde, Enlil, con ayuda de un zorro, trae a Ninhursag, que había perjurado no verle jamás con buenos ojos, hasta el día de la muerte de Enki. Pero finalmente accede a deshacer su conjuro y crea ocho deidades para sanar cada una de sus enfermedades.

Nombres
Ninhursag significa "Señora de la montaña" (del sumerio NIN = Señora, y ḪURSAG o ḪUR.SAG = Montaña sagrada). Tuvo muchos nombres aparte de los ya mencionados Ninmah (Gran Reina); Nintu (Señora del nacimiento); Mama o Mami (Madre); Aruru (Hermana de Enlil); Belet-Ili (Señora de los dioses - Akkadian). Otros nombres menores fueron Ninzinak (Señora del embryo); Nindim (Señora modeladora); Nagarsagak (carpintera de interiores); Ninbahar; Ninmag (Señora vulva); Ninsigsig (Señora del silencio); Mudkesda; Amadugbad (Madre que estira las rodillas); Amaududa (Madre que dio nacimiento); Sagzudingirenako (medio esposa de los dioses); Ninmenna (Señora de la diadema).

Utnapishtim

Utnapishtim (en Babilonia Utnapištim, y también conocido como Ziusudra por sumerios y Atrahasis por acadios) es un personaje presente en el mito del diluvio mesopotámico; siendo además el sabio al que recurre el héroe mitológico Gilgamesh, para poder encontrar la inmortalidad en El Poema de Gilgamesh.

En algún texto es mencionado como hijo de Ubartutu o Ubara-Tutukin, pero por otras fuentes se podría conjeturar que es su abuelo. En otro libro su padre es "SU-KUR-LAM", que también es traducido como Shuruppak, similar al nombre de la ciudad en que vive Utnapishtim. Sukurlam, aparece como padre de Ziusudra: «Ziusudra sucedió a su padre Sukurlam, como rey de Shuruppak». En otro texto, Utnapishtim escribe a su hijo Ziusudra, y también se refiere a él como «hijo de Ubartutu». Por lo tanto no está claro si Ziusudra era él mismo, su hijo o su hermano (en el caso que hayan sido ambos hijos de Ubartutu).

El doctor Joseph Pagan, de la UCLA ha traducido el nombre así:

El nombre se compondría de dos elementos, Ut y Naphishtim. Hasta ahora, no se ha podido encontrar una explicación satisfactoria para el primer elemento, aunque en otras inscripciones se presenta como un sumerograma cuneiforme que se leería UD.ZI, siendo ZI la representación sumeria para "vida". El segundo elemento es del babilónico antiguo acadio. En el caso nominativo sería naphishtum y significa "aliento" y, por extensión, "vida", derivado de la palabra consonántica NPSH (infinitivo naphashu) "que respira". En el caso genitivo este segundo elemento sería un compuesto: "de la vida". También hay una ortografía alternativa del nombre como Ú-ta-na-ish-tim en la antigua versión babilónica de la tablilla X (Fragmento Meissner). La omisión del signo phi puede ser un error del escriba,​ de lo contrario el nombre significaría "El que funda la vida" o "El reposo (Na) de los hombres (Ishtim)".

Leyendas
El Diluvio Mesopotámico, es un episodio del poema épico de Epopeya de Gilgamesh.​ Cuenta la leyenda que hubo una época en que los dioses vivían junto a los humanos en la ciudad de Shuruppak. Estos decidieron un día acabar con la raza humana con una inmensa inundación. Pero Ea (Enki - Enkil), tuvo piedad, y a través de las paredes de la choza de Utnapishtim, le dio la orden de destruir su casa, construir un barco y subir a este a todas las especies vivientes conocidas. La tierra fue asolada por una tempestad que duró seis días y seis noches hasta que el séptimo todo se calmó. Utnapishtim se asomó desde su barco y vio como toda la humanidad se había convertido en arcilla y como en el paisaje, solo emergía el pico del monte Nisir, lugar donde estaba posada el arca.

Después de una semana, Utnapishtim soltó una paloma que volvió. Después soltó una golondrina que también volvería. Por último soltó un cuervo que no volvió, indicando a Utnapishtim de que las aguas había bajado, ya que el pájaro había encontrado un lugar donde posarse.​ Sólo entonces salió del arca, hizo un libación y quemó como ofrendas cañas y maderas de cedro y mirto. Al fracasar el plan del diluvio ideado por Enlil, éste se enfureció y se quejó a Ea (Enki - Enkil). Pero Ea (Enki - Enkil) defendió su causa y la de los hombres de tal forma que Enlil se emocionó y bendijo a Utnapishtim y su mujer, los cuales -según palabras de Enlil- desde ese momento serían semejantes a los dioses.

El Poema de Gilgamesh no cuenta las causas de este diluvio. Pero de las muchas versiones mesopotámicas que hay de este relato, existe una, la Atrahasis (inuma ilû awîlum en babilonio) que sí nos narra dichas causas. Al parecer, antes de la existencia del hombre, los dioses trabajaban la tierra. Pero esto les costaba mucho y se quejaban hasta el punto de que algunos llegan a rebelarse. En este momento, Ea propone la creación del hombre para que realicen el trabajo de los dioses. Primeramente se creará un hombre y posteriormente catorce más (siete hombres y siete mujeres). Sin embargo, la humanidad comenzó a multiplicarse y el ruido que hacía era cada vez mayor, de tal forma que Enlil no podía dormir. Intentaron reducir su número con una epidemia y con una sequía, pero ni de esta manera conseguían los dioses reducir notablemente el número de hombres. Como último recurso, se decidió convocar el diluvio.

Ziusudra

Ziusudra (también Utnapishtim para babilonios o Atrahasis para acadios), es un héroe de la mitología sumeria, protagonista del mito sobre el diluvio universal, encontrado en su versión más antigua en una tablilla hallada en Nippur.

El mito
El mito relata cómo los hombres habían cansado a los dioses con su comportamiento y sus ruidos por lo que éstos deciden destruirlos enviando un diluvio. Enki, que había sido el creador de los humanos, según el texto de Nippur “Después que An, Enlil, Enki y Ninhursag hubo creado al (pueblo) de los cabezas negras”, se apiada y comenta que no desea la destrucción de los humanos.

Yo quiero (...)¿no? la destrucción de mi raza humana

para Nintu quiero atajar la destrucción de mis criaturas
Haré retornar a las gentes a sus establecimientos
Construirán ciudades en todos los lugares

y haré que su sombra sea apacible
Luego pide a Ziusudra que cree una embarcación y se refugie junto a las distintas especies de animales, hasta que pase el diluvio.

Ziusudra oyó a su lado

estando de pie en el lado izquierdo del muro (...):
«Junto al muro, yo te diré una palabra
(escucha) mi palabra presta oído a mis instrucciones
Un diluvio va a inundar todas las moradas
todos los centros de culto
para destruir la simiente de la Humanidad (...)
(Tal) es la decisión
el decreto de la Asamblea (de los dioses)
(Tal) es la palabra de An, Enlil (y Ninhursag)

(...) la destrucción de la realeza
Más tarde, la narración continúa con el relato del diluvio.

Todas las tempestades y los vientos se desencadenaron (en un mismo instante)

el diluvio invadió los centros de culto
Después que el diluvio hubo barrido la tierra durante siete días y siete noches
y la enorme barca hubo sido bamboleada sobre las vastas aguas por las tempestades
Utu salió, iluminando el cielo y la tierra
Ziusudra abrió entonces una ventana de su enorme barca
Utu hizo penetrar sus rayos dentro de la gigantesca barca
El rey Ziusudra se prosternó (entonces) ante Utu
el rey le inmoló gran número de bueyes y carneros
«Invocaréis por el cielo y por la tierra (...)»
An (y) Enlil invocaron por el cielo y por la tierra (...)
hicieron aparecer los animales que surgieron de la tierra
El rey Ziusudra se prosternó ante An (y) Enlil
An (y) Enlil cuidaron de Ziusudra, le dieron vida como (la de) un dios
hicieron descender para él un eterno soplo como (el de ) un dios
Entonces al rey Ziusudra, que salvó de la destrucción
la simiente de la humanidad en aquel tiempo

allende los mares, en el Oriente, en Dilmun, (le) hicieron vivir
Esto luego se vio reflejado en la mitología asiria en el poema acadio, Atrahasis, en el cual el héroe es Atrahasis.

Lista Real Sumeria

La Lista Real Sumeria es un documento entre mitológico e histórico dejado por los escribas de Mesopotamia y escrito en sumerio. La escritura sumeria fue de un carácter aglutinante o bien logográfico y que fue incorporando signos con valor fonético , silábico .Es una lengua que expresa la información gramatical mediante la adicción de sufijos o prefijos a una raíz que no suele cambiar y que nos ha legado los primeros documentos Históricos. Estos documentos refleja la sucesión de monarcas y Reyes de los primeros tiempos hasta aproximadamente las conquistas de Hammurabi.

El primer rey mencionado cuya existencia está reflejada en otras inscripciones es Mebaragesi de Kish, contemporáneo de Gilgamesh. El primer gobernante de la lista que es claramente histórico es Lugalzagesi de Umma del siglo XXIV a. C., quien conquistó Lagash, que a su vez fue conquistada por Sargón de Acadia.

Interpretación
Primera dinastía de Kish
De los reyes de la lista de la primera dinastía de Kish sólo Mebaragesi y su hijo Aka (Agga) tienen comprobación histórica, y la duración de los reinados de todos ellos es imposible. Debe tratarse entonces en general de figuras mitológicas, con posiblemente un trasfondo histórico que fue el hecho de que Kish tuviera un cierto poder regional.

Mebaragesi de Kish gobernaba hacia el 2600 a. C. Las inscripciones de Mebagaresi aparecen en la región al sur de Diyala en el antiguo Templo de Khafaji (de la época de Yemdet Nasr). La lista habla de su conquista del país de Elam, lo que informa de la antigüedad del conflicto entre Sumeria y Elam. Por esta razón, parecería que su poder se extendía hacia el río Diyala y hacia el sur de Sumeria hasta Elam.

Más tarde soberanos como Mesalim de Ur y Eannatum de Lagash utilizarían el título de rey de Kish debido a su prestigio, quizás ganado por Mebaragesi. La región de Diyala que dominaba parece que estaba en proceso de superposición del elemento semita pero que antes no era sumeria, sino quizás iránica como parecen demostrar nombres como Ishnun (convertido en Eshnunna, "Santuario del príncipe" en sumerio) o Tutub. Incluido Babilonia se decía Babilla ( que se convirtió en Babilim, en acadio semítico "puerta del dios").

Mesalim
Se le conoce también como el rey de Kish que no figura a la lista de reyes: Mesalim. Su origen no está establecido. Tenía como deidad tutelar a Ishtaran, venerado en Der, lo que hace pensar que venía de esta zona, pero como que se han encontrado inscripciones en Adab, en Sumeria Central y en Lagash no puede asegurarse nada. Esta difusión de las inscripciones en todo caso corresponde a un rey que gobernaba en muchos sitios. Se sabe que al mismo tiempo en Lagash gobernaba un Ensi (o mejor dicho, una serie de Ensis) y Mesalim hizo de árbitro en una disputa fronteriza entre Lagash y Umma de la que se hicieron eco Eannatum y Entemena, más tarde Ensis de Lagash. Hay que preguntarse si no sería el rey de Hamazi que nombra la lista.

Primera dinastía de Uruk
El poema épico de Gilgamesh nombra las luchas de este rey de Uruk con Mebaragesi de Kish. A Gilgamesh se atribuye la construcción de la muralla de Uruk, la más antigua muralla de Sumeria (hecho que parece coincidir la arqueología), y el dominio sobre Nippur, un centro más religioso que político dedicado al culto al dios Enlil. La lista de reyes nombra dos antecesores, Lugalbanda y Enmerkar. Este último lo hace el fundador de Uruk, de la unión de dos ciudades, una de ellas Eanna o Eana, sobre la que debía gobernar. Ninguno de estos reyes tiene comprobación histórica, aunque Gilgamesh figura en una lista de dioses encontrada a Shuruppak en la que se dice que su padre era Lugalbanda (las listas dicen que su padre era un fantasma) y que fueron héroes que más tarde fueron divinizados. Estos reyes de Uruk debían ser entonces contemporáneos con los últimos reyes de Kish y anteriores probablemente a Mesalim.

Primera dinastía de Ur
La siguiente hegemonía parece haber estado en Ur. Las tumbas reales de esta ciudad nombran dos reyes, Meskalamdu y Akalamdug, que no están en la lista de reyes, y una reina, Puabi. Parece que los reyes en Ur eran enterrados con miembros de su servicio (fue encontrada una tumba con 80 servidores). Ya que los reyes eran sumerios esto debía ser una costumbre sumeria y no semita, aunque se da algún caso similar en Kish. Mesanepada, hacia el 2490 a. C., sí que es nombrado por la lista, y parece que efectivamente quiso ejercer la hegemonía ya que se tituló "Rey de Kish". Ur estaba situada en una laguna comunicada con el Golfo Pérsico en una posición estratégica excepcional para el comercio en la parte sur de Sumeria. Consta su comercio con Tilmun o Dilmun, que se identifica con la costa de Arabia cerca de Baréin, Magan (posiblemente Omán, para otros Makrán en Pakistán) y Melukhkha (Makrán, para otros se ha de buscar este nombre en otra ubicación). Meskiangnana fue el hijo y sucesor de Mesanapeda, pero después siguieron dos reyes de nombre semita-acadio, Elulu y Balulu, coincidiendo su reinado con Eannatum y Entemena de Lagash.

Umma
Lugalzagesi de Umma, un rey usurpador, ejerció una breve hegemonía hacia el 2350 a. C., que después perdió ante Sargon I de Acadia.

Cronología
Protodinástico I, Reyes de antes del diluvio, legendarios
Los reyes antediluvianos, legendarios o anteriores al siglo XXVI a. C. Sus reinados eran medidos en sars -periodos de 3600 años- la siguiente unidad hasta 60 en el sistema sumerio (3600=60x60) , y en ners - unidades de 600.

"Después de que la realeza descendiera del cielo, la realeza estuvo en Eridug (Eridu). En Eridug, Alulim se hizo rey y gobernó 28.800 años."

Eridu
>> Después que la realeza decendió del Cielo, estaba en Eridu...

En Eridu Reinó Alulim : 28800 años << 8 sar >>
En Eridu Reinó Alalngar : 36000 años << 10 sar >>
>>> Luego cayó Eridú y la Realeza fue llevada a Bad-Tibira...

En Bad-Tibira Reinó En-men-lu-ana :43200 años << 12 sar >>
En Bad-Tibira Reinó En-men-gal-ana :28800 años << 8 sar >>
En Bad-Tibira Reinó Dumuzid, el pastor : 36000 años << 10 sar >>
>>> Luego cayó Bad-Tibira y la realeza fue llevada a Larag (o Larak)...

En Laraq Reinó En-sipa-zi-anna :28800 años << 8 sar >>
>>> Luego cayó Laraq y la realeza fue llevada a Zimbir...

En Zimbir Reinó En-men-dur-ana 21000 años << 5 sar + 5 ner >>
>>> Luego cayó Zimbir y la Realeza fue llevada a Surupag (o Shuruppak)...

En Surupaq Reinó Ubara-Tutu : 18600 años << 5 sar + 1 ner >>
>>> A continuación (y antes del diluvio) 8 Reyes Reinaron en 5 Ciudades ( 241000 años ) << 66 sar + 5 ner + 400 años >>

Entre estos últimos 5 reyes podemos relacionar a :

Sukurlam
Zin-Suddu¹o Ziusudra ---Noé---
[TOTAL DE AÑOS ANTES DEL DILUVIO] = 482,200 << 132 sar + 11 ner + 400 años >>
>>> Aquí ocurre el Diluvio <<<

Protodinástico II (reyes mitológicos)
ca. Siglo XXIX-XXVI a.C. Muchos reyes conocidos por inscripciones contemporáneas no se han encontrado en la Lista de Reyes Sumerios.

"Después de que el diluvio hubiera terminado, y la realeza hubiera descendido del cielo, la realeza pasó a Kish"

Primera dinastía de Kish
Jushur: 1200 años
Kullassina-bel: 960 años
Nangishlishma: 670 años
En-tarah-ana: 420 años
Babum: 300 años
Puannum: 840 años
Kalibum: 960 años
Kalumum: 840 años
Zuqaqip: 900 años
Atab: 600 años
Mashda: 840 años
Arwium: 720 años
Etana de Kish, el pastor, quien ascendió al cielo y consolidó todos los reinos * extranjeros: 1500 años
Balih: 400 años
En-me-nuna: 660 años
Melem-Kish: 900 años
Barsal-nuna: 1200 años
Zamug: 140 años
Tizqar: 305 años
Ilku: 900 años
Iltasadum: 1200 años
Mebaragesi, que conquistó Elam: 900 años (este es el gobernante más * antiguo de la lista que se confirma independientemente de la evidencia epigráfica)
Agga: 625 años
"Entonces Kish fue derrotado y el reinado fue tomado por E-ana (Uruk)"

Primera dinastía de Uruk
Mesh-ki-ang-gasher de E-ana, hijo de Utu: 324 años (Mesh-ki-ang-gasher fue al mar y desapareció)
Enmerkar, que fundó Uruk: 420 años
Lugalbanda: 1200 años
Dumuzid, el pescador: 100 años. Capturó a En-Me-Barage-Si de Kish.
Gilgamesh, su padre fue un fantasma, señor de Kulaba: 126 años.
Ur-Nungal: 30 años
Udul-Kalama: 15 años
La-ba'shum de Unug: 9 años
En-nun-tarah-ana: 8 años
Mesh-He de Unug: 36 años
Melem-Ana de Unug: 6 años
Lugal-Kitun de Unug: 36 años
(Otros soberanos conocidos por inscripciones no constan en las Listas de Reyes)

"Entonces Unug (Uruk) fue derrotado y la realeza pasó a Urim (Ur)"

Primera dinastía de Ur Hacia el 2500 a. C.
Mesanepada de Urim: 80 años
Mesh-Ki-Ang-Nanna de Urim: 36 años
Elulu de Urim: 25 años
Balulu de Urim: 36 años
"Entonces Urim (Ur) fue derrotada y la realeza pasó a Awan".

Protodinástico III
(La primera dinastía de Lagash es conocida por las inscripciones pero no se nombra en la Lista de Reyes)

Tres reyes de Awan, gobernando un total de 356 años
"Entonces Awan fue derrotado y la realeza pasó a Kish".

Segunda dinastía de Kish
Susuda de Kish: 201 años
Dadasig de Kish: 81 años
Mamagal de Kish: 360 años
Kalbum de Kish: 195 años
Tuge de Kish: 360 años
Men-Nuna de Kish: 180 años
Hansola de Kish: 290 años
Perrokung de Kish: 360 años
"Entonces Kish fue derrotado y la realeza pasó a Hamazon".

Hadanish de Hamazi: 360 años
"Entonces Hamazi fue derrotada y la realeza pasó a Unug (Uruk)". Donde rompió las cadenas que les unían.

Segunda dinastía de Uruk
Enshakushana de Unug: 60 años
Lugal-Ure (o Lugal-Kinishe-Dudu) de Unug: 120 años
Argandea de Unug: 7 años
"Entonces Unug (Uruk) fue derrotada y la realeza pasó a Urim (Ur)".

Segunda dinastía de Ur
Nani de Urim: 120 años
Mesh-Ki-Ang-Nanna de Urim: 48 años
? de Urim: 2 años
"Entonces Urim (Ur) fue derrotada y la realeza pasó a Adab".

Adab
Lugal-Ane-Mundu de Adab: 90 años
"Entonces Adab fue derrotada y la realeza pasó a Mari".

Mari
Anbu de Mari: 30 años
Anba de Mari: 17 años
Bazi de Mari: 30 años
Zizi de Mari: 20 años
Limer de Mari: 30 años
Sharrum-Iter de Mari: 9 años
"Entonces Mari fue derrotada y la realeza pasó a Kish".

Tercera dinastía de Kish
Kubaba de Kish: 100 años (Kug-Baba es la única mujer en la Lista de Reyes)
"Entonces Kish fue derrotada y la realeza pasó a Akshak".

Akshak
Unzi de Akshak: 30 años
Undalulu de Akshak: 6 años
Urur de Akshak: 6 años
Puzur-Nirah de Akshak: 20 años
Ishu-Il de Akshak: 24 años
Shu-Sin de Akshak: 7 años
"Entonces Akshak fue derrotada y la realeza pasó a Kish".

Cuarta dinastía de Kish
Puzur-Sin de Kish: 25 años
Ur-Zababa de Kish: 400 (6?) años
Zimudar de Kish: 30 años
Ussi-Watar de Kish: 7 años
Eshtar-Muti de Kish: 11 años
Ishme-Shamash de Kish: 11 años
Shu-Ilishu de Kish: 15 años
Nanniya de Kish, el joier: 7 años
"Entonces Kish fue derrotada y la realeza pasó a Unug (Uruk)".

Tercera dinastía de Uruk
Lugal-Zage-Si de Unug: 25 años (2375 a. C.–2350 a. C. en la cronología mínima) derrota en Lagash.
Accadia (Acad)
Sargón, cuyo padre era jardinero, el copero de Ur-Zababa, rey de Agadé, que construyó la ciudad: 56 años (ca. 2335-2279 a. C. cronología mínima)
Rimush, hijo de Sargón: 9 años
Manishutusu, hermano mayor de Rimush: 15 años
Naram-Sin, hijo de Man-Ishtishu: 36 años
Shar-Kali-Sharri, hijo de Naram-Sin: 25 años
" Período de crisis: ¿Quién fue rey? ¿Quién no fue rey?"

Igigi, Imi, Nanum, Ilulu: los cuatro simultáneamente gobernaron durante tres años
Dudu: 21 años
Shu-Durul, hijo de Dudu: 15 años
"Entonces Agadé (Accadia) fue derrotada y la realeza pasó a Unug (Uruk)".

Cuarta dinastía de Uruk
Ur-Ningin de Unug: 7 años
Ur-Gigir de Unug: 6 años
Kuda de Unug: 6 años
Puzur-Ili de Unug: 5 años
Ur-Utu (o Lugal-Melem) de Unug: 25 años
"Entonces Unug (Uruk) fue derrotada y la realeza pasó al ejército de los Guti ".

Periodo Guti
"En el ejército de los Guti los primeros reyes no fueron conocidos; tenía reyes propios que gobernaban por tres años"

Inkishush de Gutium: 6 años
Zarlagab de Gutium: 6 años
Shulme (o Yarlagash) de Gutium: 6 años
Silulumesh (o Silulu) de Gutium: 6 años
Inimabakesh (o Duga) de Gutium: 5 años
Igeshaush (o Ilu-An) de Gutium: 6 años
Iarlabag de Gutium: 3 años
Ibate de Gutium: 3 años
Yarla de Gutium: 3 años
Kurum de Gutium: 1 año
Apil-Kin de Gutium: 3 años
La-Erabum de Gutium: 2 años
Irarum de Gutium: 2 años
Ibranum de Gutium: 1 año
Hablum de Gutium: 2 años
Puzur-Sin de Gutium: 7 años
Iarlaganda de Gutium: 7 años
Si'um de Gutium: 7 años
Tirigan de Gutium: 40 días
Quinta dinastía de Uruk
Utu-hengal de Unug, expulsa a los Guti
Tercera dinastía de Ur
"Renacimiento Sumerio"

Ur-Nammu de Urim: 18 años gobierna hacia el 2111 a. C.–2094 a. C. en la cronología mínima
Shulgi: 46 años gobierna hacia el 2093 a. C.–2046 a. C. en la cronología mínima
Amar-Sin de Urim: 9 años hacia el 2045-2037 a. C.
Shu-Sin de Urim: 9 años hacia el 2036-2028 a. C.
Ibbi-Sin de Urim: 24 años hacia el 2027-2003 a. C.
"Entonces Urim (Ur) fue derrotada y la realeza pasó a Isín"

Dinastía de Isín
Estado amorrita independiente de la Baja Mesopotamia. La dinastía acaba hacia el 1730 a. C. en la cronología mínima.

Ishbi-Erra de Isín: vencedor de Ibbisin reinó 33 años hacia 2017-1985 a. C.
Shu-Ilishu de Isín: 20 años
Iddin-Dagan de Isín: 20 años
Ishme-Dagan de Isín: 20 años
Lipit-Eshtar de Isín: reinó 11 años hacia 1934-1924. elaboró un código de leyes.
Ur-Ninurta de Isín (hijo de Ishkur): 28 años. Con él termina el predominio de Isin.
Bur-Sin de Isín: 5 años
Lipit-Enlil de Isín: 5 años
Erra-Imitti de Isín: 8 años
Enlil-bani de Isín: 24 años
Zambiya de Isín: 3 años
Iter-Pisa de Isín: 4 años
Ur-Dul-Kuga de Isín: 4 años
Sin-Magir de Isín: 11 años
Damiq-ilishu de Isín: 23 años

"Son 11 ciudades allá donde la realeza fue ejercida. Un total de 134 reyes que en conjunto reinaron más de 28.876 años".