sábado, 5 de março de 2016

Viajes Astrales De William Judge


William Judge, uno de los fundadores de la Sociedad Teosófica,
en una conferencia en Nueva York en 1876, narró entre otras cosas que:

« Una noche me recosté en el departamento de la señora Blavatsky con la intención de ver si podía salir de mi cuerpo. Los que estaban alrededor de mi dijeron que en unos cuantos minutos yo estaba roncando fuertemente, pero conmigo esto era totalmente diferente. No noté ninguna interrupción de la consciencia, ni tampoco me sentir por ningún momento como estando dormido.

Me pareció, como si estuviese despierto de pie afuera en el vestíbulo y que tenía puesto un pañuelo sobre mis ojos tal como yo lo había dejado al recostarme. No tuve éxito en quitarme el obstáculo de mis ojos y así salí al vestíbulo y pensé en ir a ver mi cuerpo en la cocina, y estando ahí, arroje el pañuelo ejerciendo un poderoso esfuerzo, lo cual hizo que inmediatamente me encontrara en donde me había recostado, frente a las risas de los que observaban que escuchaban mis poco musicales ronquidos.

Y aquí tengo que tomar el testimonio de otros. Ellos dicen que mientras que mi cuerpo roncaba, mi doble, o simulacrum, o scin lecca, o como quieran llamarlo, el cual es exactamente una réplica visible de mi mismo, fue visto en su trayecto hacia la cocina.

En otra ocasión me fui a un cuarto que estaba dos habitaciones de distancia de aquel en el que el coronel Olcott se encontraba sentado. Recostándome en una cama, concentré mis pensamientos en la habitación que apenas había dejado, manteniendo mis ojos cerrados. En poco tiempo fui capaz de sentir como si tuviese una consciencia doble.

Podía sentir claramente la cama que estaba bajo de mí. Pero también podía escuchar a Olcott hablando, como si estuviese en la misma habitación; yo estaba seguro de que estaba en la misma habitación con él. En ese momento la señora Blavatsky le preguntó al señor Olcott si me veía sentado en el mismo sofá que había dejado hacía unos cuantos minutos. Él explicó que lo que estaba sentado en el sofá era mi cuerpo físico, y para probarlo se fue a la otra habitación y ahí encontró mi cuerpo material enfrente de él.

[Posteriormente] Llegó el día en que mientras que me encontraba sentado en un cuarto obscuro en mi casa pensando con intención en el coronel Olcott en su cuarto, me encontraba en ese cuarto – y posteriormente el coronel Olcott dijo que de hecho yo había estado en ese cuarto. »

(Theosophical History, Vol.IX, No.3, p15-16, julio de 2003)