Viaje Astral Modulo Avanzado I

 

EL PUNTO QUE SE DESVANECE INFINITAMENTE y LA "SALIDA" CINETICA A PRESIÓN

 

El punto que se desvanece infinitamente es EL MAS PRECIADO INSTRUMENTO DEL OPERADOR, siempre que sea utilizado con Voluntad, Amor/Intuición y Mente Creativa. En Oriente se le llama el "punto bindu", no obstante en Occidente se le describe mejor como "el punto que se desvanece infinitamente".

Un punto es una representación simbólica de algo que no puede verse de otra forma; "el punto que se desvanece infinitamente" es una verdadera representación del poder concentrado del operador -si desata la fuerza Kundalini (de forma deliberada o inintencionada en el nivel consciente) puede entonces concentrarse en este Punto y "fugarse", metafóricamente hablando o no tan metafóricamente hablando.         

El efecto resultante es una "salida" de energía y velocidad, y nuestro operador se encuentra tarde o temprano en otra parte -probablemente más temprano; el siguiente ardid es aprender a acceder a sitios de tu elec­ción -a menos de que no estés particularmente preocupado de donde va­yas a parar, desde luego.

Para hacer esto puedes proyectar un símbolo representando el lugar de­seado, o una imagen o una idea del sitio que desees alcanzar, y sobre­ponerlo en el Punto.

El efecto de la "salida" cinética a presión no es distinto de la acele­ración de la nave Enterprise del Capitán Kirk (Start Trek) en el Hiper­-Espacio en contraste con las protestas de Scotty, de que la nave se des­integrará (sin hacer mención a las acrobáticas desmaterializaciones practicadas como algo rutinario por el Capitán Kirk, con su categórico coeficiente intelectual que le capacita poco menos que como comandante de una nave espacial).

Hay un correcto, extendido y legítimo rumor de que estas ideas cinema­tográficas son "implantadas", cortesía de las agencias extraterrestres.

Y si hay un "Scotty" dentro de ti puedes decirte "no puedes cogerlo", bueno corresponde a ti decidir. ¡Ten cuidado con el "factor deformante"!. Necesitarás humor para abordar el Más Allá.

 

LA CUENTA ATRAS PARA EL DESPEGUE

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Una vez aparte la fantasía y las consideraciones de las naves espacia­les, puedes contar de forma descendente para la proyección -es mejor hacer esto visualmente: 10…9...8...7...6...5…4...3...2...1...  ¡despegue!

 

LA PROYECCIÓN DE LA BURBUJA

 

Una vez libre del plano físico no hay una razón específica que diga que "debamos" conservar un perfil humano -de hecho la mejor y más di­námica forma de todas es una esfera.

Las siguientes técnicas pueden utilizarse en conjunción con las dadas previamente, la única diferencia es que en el momento de la proyección necesitarás "envolver" todas tus energías en una bola de fuego astral.

Prueba e imagínate teniendo un cuerpo astral que es una bola de ener­gías ardientes -como una pequeña estrella-solar; una con la que puedas ver globalmente a través de 360 grados tridimensionales; una que pueda extender "sondeos de energía" en cualquier dirección para "tocar" cosas.

Ahora imagina que puedes sentir el eje de esta estrella-solar en miniatura, -la columna vertebral si quieres-. Alrededor de esta estrella solar hay un invisible campo de energía - su "aura". El "aura" tiene su centro en: 1) el punto medio de la esfera, 2) el eje polar de la bola ardiente.

Si puedes imagínate esto claramente, entonces puedes efectuar el cambio de figura que es necesario para proyectarse de esta forma. Las verdade­ras ventajas de hacer esto así, se harán evidentes cuando efectivamente lo hagas.

En el momento de la proyección debes "encapsular" tus energías astrales en la figura de la estrella-solar, sin permitir ningún "agujero", es decir, necesitas crear un sello perfecto de energía. Proyectarte a si­tios cercanos o lejanos usando cualquier técnica suplementaria te esti­mulará al mismo tiempo, y tan pronto como aparezcas en cualquier lugar dado "energetiza" tu campo o aura. Luego puedes permanecer consciente del aura, o puedes olvidarte de él.

Estás ahora en un universo de estrellas, aun cuando sólo seas una muy pequeña, casi insignificante -difícilmente perceptible en el telón de fondo del Infinito.

Por razones obvias no serás capaz de caminar, porque en esta forma ¡no poseerás piernas! A donde vayas lo harás volando. Cuando desees ver algo en detalle, focaliza tu atención en ello -esto "abstraerá" tempo­ralmente tu visión global en tanto tu consciencia está "direccionada". Cuando desees tocar un objeto o "catar" un campo de energía, alarga un rayo de energía hacia él y siéntelo. Si deseas entrar en afinidad con un objeto u otro ser, permite mezclar tu aura con su propio campo aurico.

Si deseas incrementar el poder de resolución de tu consciencia, acelera el ritmo de circulación de tu energía a través de tu bola de fuego y aumenta la extensión de tu campo aurico. Luego, si deseas hacerlo así, atrae más energía astral hacia ti, y de ese modo incrementa la extensión de tu estrella-solar -una ADVERTENCIA no obstante, mientras más hagas esto, más entrarás en contacto con los campos de energías de otros se­res, y este proceso puede arrollar tu habilidad para analizar-sintetizar la información-energía o la concentración de tu consciencia -ESPECIAL­MENTE SI ENTRAS EN CONTACTO CON SERES MUCHO MÁS PODEROSOS QUE TU. Por tanto, procede con cuidado y sensibilidad, y no pruebes ni llegues a ser "demasiado voluminoso" tan pronto; "presiente" tu camino en medio de todo esto con auto-control y usa tu intuición en todo momento.

La segunda "burbuja" técnica implica llegar a hacerse consciente del campo aurico alrededor de tu cuerpo astral proyectado en forma humana. Practicando esto (ya sea en estado proyectado o no) se aportará algo adicional, una capa consciente de "aislamiento" y protección; desde esta posición ventajosa puedes tranquilamente alargar un "tentáculo energético" para tocar y "probar" cosas sin usar tus manos y brazos.

 

UTILIZANDO EL ÁNIMA O ANIMUS COMO UN GUÍA

 

¿Qué es el Anima o Animus?, Si estás en la actualidad encarnado como hombre entonces tienes un ánima, y si eres una mujer tienes un ánimus. Esencialmente es la contraparte de ti mismo en el nivel sexual.

Este lado opuesto y complementario de ti mismo tiene sus propios puntos de vista y sus propios poderes de percepción, y están "condicionados" por la polaridad sexual opuesta. Puedes aprender a "reunirte" con tu ánima/ánimus durante la proyección y permitir ser guiado por él/ella.

En el nivel astral él/ella también representa a tu Santo Ángel Guardián o Ángel Solar -un ser, que aunque parte de "tu" totalidad, es no obs­tante una inteligencia evolutiva y sensible. Su sentido de la realidad es completamente diferente de tu propia personalidad, y opera y vive en los Subniveles Superiores del Plano Mental. Como el lado humano de un espíritu individual evoluciona hacia un contacto consciente con los planos internos, él/ella "asciende" y comienza a "colmar" a la persona­lidad con energías e informaciones superiores. A medida que las cosas progresan más y el ser humano individual experimenta el contacto espi­ritual (en las primeras o segundas lniciaciones Vitales), él/ella fu­siona parte de su consciencia con la del ser humano individual y de ese modo crea un nuevo "Cuerpo de Luz" -que llegará a ser el vehículo espiritual para esta unión de consciencias. Efectivamente él/ella y la parte humana recrean una realidad andrógina -y aunque el ser humano individual no será capaz de mantener un contacto consciente permanente con su Ángel Solar hasta después de la tercera Iniciación Vital, -y él/ella sabrá sin embargo que su "Ángel" está aquí, completamente real, muy activo y muy implicado en su progreso. El Ángel Solar es lo que al­gunos llaman el "alma" -un ser intermediario entre el Espíritu Superior -Yo Soy (Kia)- y el inferior o personalidad. Como más tarde se expan­de en una relación consciente siempre creciente con el Espíritu, él/ella llegan a ser un "Hombre Ángel" o una "Mujer Ángel" -un ser hermafrodi­ta consciente y mezcla de consciencia humana y angélica.

Tu Ángel Solar puede proyectarse "abajo" en el Plano Astral, en tanto que tú te proyectas por "encima" de él, y puedes establecer una relación en el nivel consciente como dos seres aparentemente individuales, un encuentro como hombre y mujer. Si permites ser guiado por tu ánima­/ánimus, de esta manera, él/ella puede mostrarnos muchas cosas que te serán beneficiosas para tu crecimiento y entendimiento.

 

LLEGANDO A SER EL ANIMA O ANIMUS

Si el tiempo es propicio (es decir, si tu estado de evolución lo permi­te) puedes elegir también unirte en el aparente cuerpo de proyección de tu ánima/ánimus, y explorar cosas astralmente como una entidad unida.

Poco a poco llegarás a estar más y más identificado en el proceso con tu Ángel Solar -hasta que puedas llegar a estar más identificado con él que con tu yo inferior o ego-personalidad.

Esto puede crearte dificultades, ya que día a día te irás sintiendo crecientemente "femenino", si eres hombre, o crecientemente "masculina", si eres mujer. Esto puede conducirte a un sentimiento de transexualidad y dirigirte a un sentido esquizoide de la consciencia. No obstante, es­te es sólo el efecto inicial de unión con tu ángel -a medida que se vaya progresando te encontrarás no sólo aceptando este proceso de fusión con tu polaridad opuesta-complementaria y tu naturaleza esencialmente andrógina, sino que también llegarás a ser bastante flexible siendo una cosa en un nivel (hombre o mujer) y otra en los Planos Superiores. De esta forma puedes explorar la gama completa de polaridades posibles, y finalmente surgir trascendentemente como un ser andrógino en los Planos Superiores.

Debido a que la evolución en este planeta se presenta en un estado de aceleración e iniciación, necesitarás hacer los ajustes adecuados de consciencia así como no llegar a ser arrollado por sentimientos tran­sexuales con los que puedes encontrar dificultades a la horade hacer­les frente. Este es tu desafío. En el nivel inferior puedes presenciar el suceso de como las mujeres de todo el mundo se hacen más "feministas" (expresando el poder "masculino" dentro de ellas mismas, tanto co­mo la fuerza "femenina" que es suya por derecho de encarnación y naci­miento), y como los hombres se hacen menos "machos" y más "femeninos" -creando alguna confusión de identidad en ambas lados, en el momento presente.

Dentro de aproximadamente 600 años una nueva "raza raíz" vendrá a existencia -será andrógina y representará la realización de este proceso en el plano físico.

 

DIRIGIÉNDOSE AL YO SUPERIOR

  

Para comprender cualquier cosa tangible sobre el Yo Superior debes experimentarlo. Nuestra enseñanza está diseñada para atraer tu atención a Su Existencia y poco a poco acceder a Él; y más tarde "llegar a ser" Él -de hecho "llegar a ser" lo que has SIDO siempre en un nivel supe­rior -el Dios-a; o el Ser Uno… Excepto que cuando lo haces así con­duces a tu propia individualidad a un estado que era previamente "no individualizado" -de aquí el propósito completo detrás del "descenso" ­en/y a la creación de los mundos inferiores -individualizar el Espíritu.

Siempre que te "dirijas" al Ser Uno en tu interior (en cualquier forma de súplica) estás enteramente en comunicación con el "Dios-as de todas las cosas" –Él/Ella es sólo un Ser Misterioso mientras no se le identi­fique conscientemente. Tan pronto como Él/Ella sea "conocido" interna­mente, los Misterios de Su Vida se harán claros como el cristal. Sus Misterios son en última instancia tan simples, como increíblemente complejos en el nivel de la manifestación. Él/Ella es el "Uno que se alcan­za al final de todos los deseos"; Él/Ella es el "Manifestador" y el "Manifestado" / "Creador-Creado".

Cuando viajes en el Más Allá -Su Más Allá- tú puedes aprovecharte de Su ayuda; todo lo que precisas hacer es ser consciente de que ÉI está ­"aquí". Siempre ha estado contigo, y estará siempre contigo porque TÚ ERES ÉL.

 

"¡TÚ ERES DIOS!"

 

Todas las verdaderas Religiones y Escuelas de misterios han conocido siempre esto, incluyendo al Cristianismo original -mucho antes de que llegara a ser una organización política pseudoreligiosa. Sacerdotes y Sacerdotisas fueron introducidos en estos Misterios hasta que fueron corrompidos por un culto partidista-político-fanático-financiero-dogmá­tico y chauvinista. Hemos tardado dos mil años en redescubrir el hecho de que Cristo es una Fuerza Andrógina que encauzó (en parte) Su Mensaje a través de un Iniciado con el nombre de Jesús (Iesu/Jeshua), y antes Gautama Buddha, Melquisedek y otros; y desde entonces, otros más -de­sarrollando todos (no necesariamente "perfectos") fracciones individua­les de Él mismo.

Hay muchas representaciones de esta Fuerza en el mundo -Cristo/Dios ­pero como individuos, pueden cometer errores humanos- en conexión directa a que ellos estén o no armonizados con este Poder-de-Revelación, Amor e intuición (2º Rayo). Junto con las otras dos fuerzas –Voluntad y Poder (1er. Rayo) e Inteligencia Creativa (3er. Rayo) -el Cristo forma el Triangulo Espiritual o "Trinidad" -y este es el Yo Superior dentro de TI, y dentro de todos nosotros.

 

EL FACTOR EXTRATERRESTRE

 

Sin tener en cuenta si esto es aparente o no, la humanidad es la ex­tensión de diversas Razas Espirituales Extraterrestres en los planos inferiores, incluyendo el plano físico. Cada uno de nosotros está "Eclip­sado" o inspirado por una de estas Razas - o por varias, según el caso.

La Tierra no vive en exclusión del resto del Universo. Es un "crisol" de diversas fuerzas convergentes que han decidido adelantar su evolu­ción a través del desplazamiento de la humanidad en este pequeño pla­neta. La razón para esto no se hará clara hasta que la actual naturaleza y propósito de este planeta sean "conocidos" - y entonces se hará obvio "por qué" existe interés en parte de estas Razas en estar represen­tadas aquí a través del medium de la encarnación humana.

El Espíritu Tierra está desarrollando una cualidad particular - por me­dio del 4º Rayo (la Armonía a través del Conflicto) - que está experi­mentando el Espíritu en el borde de los niveles inferiores - por medio de una difícil combinación de energías positivas (evolutivas) y negati­vas (involutivas). Esto está añadiendo una nueva fuerza a los campos de energía de estas Razas, moderada por experiencias dificultosas en los "planos menores" de la Tierra (físico-éterico, astral y mental inferior). El drama de la Humanidad de los últimos milenios de años es el de la preparación para una futura expresión que será tan ARMONIOSA como en el pasado ha sido a veces (y a menudo) caótica, viciosa, violenta y homi­cida. Esto es solamente un estado de imperfección haciéndose gradualmen­te más perfecto.

La Humanidad está siendo probada una vez más en este momento para ver si responderá más a la Armonía inherente del 4º Rayo en el que entran en Conflicto aspectos de esta fuerza. Las primeras dos guerras mundiales fueron el resultado de una reacción humana a un chaparrón de energías espirituales pretendiendo separar las energías positiva de lo negativo. Esto ha enfrentado a la humanidad con una elección entre una tercera guerra devastadora, o la Paz y la Revelación.

En el Plano Astral puedes contactar con la Raza Extraterrestre a la que tú perteneces, y puedes descubrir algo de tu propósito individual y grupal en este tiempo - especialmente si accedes a esos niveles de consciencia que "residen" más allá del Plano Astral.

Sucesivamente esto revelará lo que tienes que hacer los próximos años para asistir al desdoblamiento de la Tierra hacia un nuevo estado de Armonía. Esto es un proceso en marcha, y habrá otros tipos de conflic­tos en los siglos por venir. Sin embargo ha sido resuelto un estado de paz durante el momento presente hasta el año 2001 - entonces el próxi­mo Gran Encuentro de las Razas Extraterrestres tomarán lugar en "Sham­baIla".

 

YENDO MÁS ALLÁ DEL PLANO ASTRAL

 

Aprender a proyectarse astralmente es sólo un primer paso en el viaje al Más Allá, incluyendo todas las implicaciones anteriormente descritas. Tú puedes aprender a proyectarte más allá del Plano Astral al mismo tiempo que te esfuerzas para perfeccionar la proyección astral.

Las otras monografías de nuestra orden se esforzarán por ayudar a conseguir esto.

 

EL ENLACE ENTRE SUEÑOS Y PROYECCIÓN ASTRAL

 

En algunas lenguas antiguas la palabra "sueña," está relacionada con "alegría" que es también una buena definición para la proyección astral; ¡es una experiencia gozosa!.

Existe un fuerte enlace entre soñar y la proyección astral, ya que ambos tipos de experiencias ocurren en el nivel astral; la única diferencia fundamental entre ambos es que generalmente el soñar implica una des­concentración, una visualización interna, mientras que la proyección astral es (en el mejor caso) el resultado de un sentido altamente fo­calizado de la consciencia y la percepción astral, y en este caso la atención se vuelve hacia el mundo astral externo.

En este sentido, se puede llegar a entender fácilmente por qué una pro­yección puede degenerar en un sueño tan pronto como abandones el foco superior de la segunda atención; cada vez que la "autopercepción" pier­de la visión del mundo astral externo, se repliega de nuevo sobre sí mismo y comienza el sueño - sacando información de sus memorias- espacios-internos y tomando también del mundo externo y combinándolos en una fantasía que es a menudo absurda.

Existen diferentes niveles para el sueño de la misma manera que existen varios subniveles para el Plano Astral. Un sueño muy claro y lúcido es el equivalente de una proyección, aunque puede participar de un elemen­to de fantasía, mientras que una proyección muy clara parecerá perfecta­mente real - de hecho, tan real que parecerá más tangible que una expe­riencia física similar, usando tus sentidos físicos.

Una experiencia astral vívida es más fuerte, más brillante, más podero­sa, más diversa y está más cerca de las experiencias que uno puede te­ner en los Planos Superiores.

La consciencia astral, como ya hemos visto antes, es diferente de la consciencia física; para empezar no hay interferencias cerebrales con las percepciones propias; en segundo lugar, el sentido astral de la visión puede ser tan bueno que uno puede ver detalles claros a gran distancia tan bien como puede ver objetos próximos con una precisión casi microscópica; en tercer lugar, la consciencia astral es muy fle­xible, muy abierta a las ideas y menos afectada por condicionamientos; en cuarto lugar, uno puede volar y hacer gran número de cosas que son o imposibles o bien muy difíciles de hacer en el plano físico - tal como viajar a otro planeta sin una nave espacial y sin un soporte vital­ en quinto lugar, no hay necesidad de comida, bebida, dinero, posesiones o incluso de casa - y si desearas algo, todo lo que tienes que hacer es crearlo mentalmente, utilizarlo y luego dejarlo desaparecer tan pronto como no lo necesites más.

Existen diferentes razones para hacer la Proyección Astral y el Plano Astral muy interesantes.

Hay otras ventajas que son aún más excitantes; puedes cambiar la forma de tu cuerpo a voluntad y experimentar la vida astral desde diferentes puntos de vista; puedes cambiar de sexo y sentir lo que te guste ser; una mujer o un hombre (sea lo que fuere es el complementario-opuesto de lo que tu eres físicamente); puedes alterar el modo de tu conscien­cia con casi igual facilidad; puedes moverte de un sitio a otro sin cuerpo, como un punto de consciencia concentrado; puedes unirte con tu consciencia de Ángel Solar - es decir, tu Ángel que vive en el Plano Mental Superior, con todo puedes proyectar la parte "descendente" de tí mismo para concentrarte, en el fragmento de personalidad humana del Ser Total; puedes encontrar gran variedad de seres astrales y seres su­periores que pueden haber proyectado también su parte "descendente" - incluyendo Seres del Espacio, Maestros-Iniciados, Brujos y Brujas, etc.; las posibilidades son infinitas.

 ¡Es difícil aburrirse en el Plano Astral!

El hecho de que haya subniveles para este plano es una clara indicación de la variedad de la que está compuesto.

Inversamente, los sueños son “sensaciones" de la mente subconsciente y de la imaginación, liberadas de la necesidad de ser siempre lógicas. Es interesante reseñar que la palabra "emoción" proviene del latín "emotio", que en un sentido es "sentir"; los sueños pueden verse como una colección de "sensaciones". Cuando la proyección de estas sensacio­nes es patentemente ilógica (como puede verse) da forma a la "facilidad cambio" que es característica de los sueños - donde toda clase de fac­tores diferentes y, algunas veces no relacionados, pueden tomarse conjuntamente para formar una secuencia, o una serie de secuencias.

Los sueños son salidas para los impulsos psíquicos que son generados por los seres con una vida orientada en un sentido emocional con deseos y necesidades. La proyección astral, sin embargo, es una experiencia directa del campo “emocional" tan influenciado por la mente, y con completo control de la experiencia dirigida a un sentido objetivo de la realidad.

Existen innumerables sitios en el Plano Astral, y ningún operador podrá decir jamás que ha visto todo lo que hay que ver, o ha experimentado todo lo que hay que experimentar aquí. Lo que es más, cada ser que vive en la zona astral, puede crear allí su propio "mundo de fantasía”; dos o más seres pueden encontrarse en una perspectiva particular, y de ese modo participar de un principio de consciencia colectiva - por tanto existen civilizaciones y sociedades en el Plano Astral cuyos miembros esencialmente "concuerdan" en una perspectiva dada, y la experimentan en conformidad.

Las energías naturales del Plano Astral son las "esencias" de ciertos Ángeles, llamados Agnisuryans en Sánscrito, y son literalmente el ve­hículo para la consciencia astral; como grupo son una función del Ángel Superior llamado Varuna, en el hinduismo, que es el Ángel del Plano Astral.

Otra manera de definir la diferencia entre los sueños y la proyección astral es interpretar los sueños como "ensoñación inferior" y la pro­yección astral como "ensoñación superior" - siendo los sueños relativa­mente desconcentrados y confusos, por lo tanto "irreales", y siendo las proyecciones astrales más focalizadas y lineales, por tanto más "reales” el uno es semejante a una forma interna de "balbuceo" psíquico, y la otra es, de hecho, una percepción directa del mundo astral externo.

 

En el plano físico hacemos muchas cosas semejantes, por así decirlo:

 

- Cuando soñamos de día, nuestra consciencia llega a estar algo abstraída - y realmente, por momentos no vemos el mundo externo.

- Cuando nos concentramos en el mundo físico de nuestro alrededor, ve­mos este mundo.

 

En efecto este es otro ejemplo del significado del símbolo para el Infinito (una figura de "8" tendido de lado "eI infinito") simbolizando los mundos "internos” y "'externos".

Mucha gente no puede entender sus sueños o su naturaleza o lo que suce­dería si se concentran conscientemente en los detalles de sus percep­ciones oníricas, exteriorizando de este modo su atención - pero conocen el Plano Astral, al menos, de una forma limitada; ¡la mayoría de ellos lo experimentan cada noche!.

Esto es por lo que puedes aprender á proyectarte conscientemente. Si los métodos directos de inducir una experiencia fuera-deI-cuerpo, tal como ha sido descrita antes en estas monografías, parecen muy difíciles para tí por el momento entonces prueba a alcanzar la consciencia astral tomando posesión de tus sueños.

Posiblemente estás al borde de una experiencia que revolucionará tu forma de percibir la vida, y las implicaciones de la misma son de largo alcance y de amplia extensión.

La proyección Astral en sí misma no es un fin; en ningún momento debe­rías pensar esto. Es una experiencia que puede prepararte para otras cosas; una lanzadera hacia mayores altura cuyas cimas están más allá de los horizontes visibles de tu conocimiento presente. Medita ampliamente lo que saques de estas aventuras - nadie te dice que no puedas conseguir esto o alcanzar aquello o incluso que esto no tenga una apli­cación práctica. Puedes creer que esto requiere alguna clase extraor­dinaria de esfuerzo para introducirte dentro de lo Desconocido - y esto, hasta cierto punto, es verdadero; pero no te impedirá hacerla.

 

EL MUNDO DEL SUEÑO ASTRAL

 

Nuestros sueños, generalmente están compuesto de fragmentos eclécticos de información derivada de nuestras experiencias en ambos planos, físi­co y astral, y pueden contener un elemento simbólico que es, a veces, apropiado para nosotros en el “aquí y ahora".

Uno puede interpretar la simbología de estos sueños y ver en ésto una comunicación desde la mente subconsciente al yo consciente - tanto si esta comunicación es de un gran significado como si no varía mucho de la clase de sueños que teníamos en otro tiempo; alguno son "paseos" psíquicos sin particular importancia.

En algunos aspectos, el "sueño inferior" generalmente es muy parecido a una válvula de presión desprendiendo vapor - pocos de nosotros viven naturalmente- y ya que negamos muchos de nuestros impulsos, nuestra psi­que tiende a arrojar el "producto inútil" de nuestros sentimientos re­primidos. En el transcurso de hacer este, una gran parte de la "infor­mación" consigue a menudo mezclarse desesperada y .totalmente, y tanto si esto representa o no ira, celo, envidia, deseos secretos, odio, o algún otro rasgo negativo, necesita ser determinado con genuina sofis­ticación, y ciertamente no por examinar el indicio en un libro acerca de los sueños.

Nuestros Cuerpos Astrales pueden filtrar información que llega desde el mundo astral externo, y alimentan todo lo que puede parecer relevan­te para la estructura simbólica de nuestros sueños; recíprocamente, ya que nuestra atención es difusa durante los periodos de "sueño inferior", podemos encontrarnos extraviados por causa de un caleidoscopio de imá­genes-experiencias que no pueden ser relacionadas en el mínimo detalle - también podríamos llamar a esto "auto-síntesis caótica astral".

Además en cualquier momento somos rodeados por otros soñadores, por esto podemos coger información de otros sueños -esto produce entradas de información que no son parte de nuestra memoria individual; debido a que los sueños pueden persistir por un rato, consiguiendo un tipo de independencia temporal de los soñadores, que los crearon, podemos vol­vernos sensitivos a la información-sueño que es simplemente el medio ambiental en el Plano Astral. Por último, podemos acceder a lo que en términos psicológicos es denominado el Mundo Subconsciente, que está lleno de substancia onírica compuesta de imaginería simbólica reforza­da que ha sido acumulada durante siglos.

El mundo de los sueños astrales es semejante a un "sueño-antena" de burbujas, y cada burbuja pertenece a un ser sensible (tanto si es huma­no como si no). Las burbujas pueden rozarse simultáneamente y luego romperse las unas con las otras en pocos instantes, o en más tiempo, recobrando antes su autonomía aparente; por tanto nuestros sueños a ve­ces pueden ser 'invadidos' por la substancia de otra burbuja.

Desde otro punto de vista, nuestros mundos de sueño personal están compuestos de las siguientes facetas:

 

-       Experiencias afines y antagónicas.

-       Memoria trans-encarnacional (es decir, memoria de las experiencias que hemos tenido en otras vidas).

-       Memoria inter-encarnacional (es decir, memoria de las experiencias que hemos tenido entre las encarnaciones).

-       Experiencias astrales que tenemos durante el sueño físico.

-       Memorias ADN, impresionadas en los cromosomas que son transferidos en la experiencia-información desde generaciones familiares físicas anteriores a nosotros.

-       Sueños celulares (es decir, cada célula de nuestro cuerpo es un pequeño ser que sueña también -aunque generalmente hará esto colectivamente, con otras células de su mismo grupo -).

-       Los sueños de los grupos elementales dentro de ambos cuerpos, físico y astral.           

-       Los sueños de otros tipos de elementales.

-       Información angélica (que es a menudo altamente simbólica).

-       Penetraciones astrales externas o las percepciones astrales filtradas.

-       En algunos casos, informaciones-energías del Plano Superior, como procesos a través de nuestros Cuerpos Mentales, luego a través de nuestros Cuerpos Astrales.

-       Etc...

 

Por tanto hay diversidad de objetivos y no todos estos pueden ser atri­buidos directamente al estado psíquico personal.

Algunas de estas memorias (surgiendo desde las células corporales, ADN, los grupos elementales físicos...) son sólo contactadas si nuestros cuerpos astrales son coincidentes con nuestros cuerpos físicos durante nuestros periodos de sueños - los sueños que tenemos cuando salimos fue­ra del cuerpo no contienen probablemente esta clase de información.

La fuerza de los elementales es particularmente menospreciada - ya que los elementales pueden a veces tener un fuerte deseo de vivir una existencia parecida a la humana, o invadir la psique de una persona para vivir a través de ese sujeto - aún cuando su forma evolutiva no es ha­cerlo así -. Sin embargo ellos reaccionan adversamente a nuestra nega­tividad y nosotros a la de ellos. Raramente nos damos realmente cuenta de como estamos influenciados por estos seres microscópicos que nos ro­dean y que componen las energías de nuestros cuerpos inferiores (luna­res).

Los seres humanos astrales pueden también "invadir" nuestros sueños, y tomar parte en los dramas-oníricos que experimentamos otros tipos de seres, cuyo linaje es a menudo algo confuso, pueden a veces ellos mis­mos participar a través de nuestros sueños. Por tanto, estamos tratando con algo muy complejo siempre que consideremos los sueños como una to­talidad.

Si amamos toda vida y siempre tenemos sentimientos positivos, entonces nunca tendremos pesadillas o sueños incómodos - los elementales, que están cansados de nuestros niveles "normales" de negatividad, responde­rán acaloradamente si tomamos sus sentimientos en consideración, y lue­go contribuirán a nuestra prosperidad; nuestros sueños serán entonces armónicos.

 

TOMANDO POSESIÓN DE LOS SUEÑOS CONSCIENTEMENTE

 

Ya que los sueños y la proyección astral son, para todos los fines y efectos, las dos caras del mismo fenómeno, es posible tomar posesión de los sueños, y transformarlos en el equivalente a una experiencia proyectada.

Para hacer esto tienes que saber primero todo lo que has soñado - tan pronto como seas consciente de esto, puedes, concentrarte en los elemen­tos de tu sueño, y esto despertará tu segunda atención, ayudándote e introduciéndote en un estado de sueños lúcidos; después estarás lleno de conocimiento astral.

Tu objeción natural será la mayor parte de las veces, cuando estés soñando y no te digas a tí mismo, "yo estoy soñando"; generalmente es­tarás cogido en los acontecimientos de tus sueños y no específicamente atento a tu estado de consciencia. Cuanto más sepas de esta materia, más consciente serás de tus sueños - y apenas te des cuenta de lo que estás soñando, entonces coge esta oportunidad inmediatamente y concén­trate en el objeto-sueño mas cercano de tu alrededor; tan pronto como tu atención esté completamente despierta percibirás el mundo externo astral.

Si tu sueño es ya claramente lúcido - es decir, si tu atención está despierta de un 60 a un 90% - encontrarás esto relativamente fácil; y teniendo en cuenta que, tu continuas haciendo el esfuerzo de concentrar­te en tu entorno astral, lograrás completamente, o casi completamente, la consciencia astral.

Una excelente forma de activar esta consciencia es mirar a las palmas de tus manos - percibiéndolo todo en finos detalles- después, una vez que tu percepción sea firme, para visitar tu entorno astral concéntrate en cada detalle separadamente para empezar, y luego en una amplísi­ma gama de objetos simultáneamente; tan pronto como tu atención vacile mira de nuevo tus manos, reconcentra tu visión, y examina tu entorno astral una vez más..., y haz esto tantas veces como sea necesario.

Similarmente, si estás en estado proyectado y comienzas a perder tu concentración, concéntrate inmediatamente en tus manos o en los deta­lles alrededor tuyo para recobrar completamente tu nivel de conscien­cia astral.

Este truco aparece en los libros de Carlos Castaneda, y calurosamente te recomiendo leerlos también, si no lo has hecho ya - LAS ENSEÑANZAS DE DON JUAN; UNA REALIDAD APARTE; CAMINO A IXTLAN; RELATOS DE PODER; EL SEGUNDO ANILLO DE PODER; EL DON DEL ÁGUILA; EL FUEGO INTERIOR, etc.

Con práctica puedes emplear varios minutos o incluso horas explorando el mundo de los sueños en un nivel consciente, y viendo cada cosa con asombrosa claridad.

 

LA PSICOLOGÍA DE LOS SUEÑOS Y LA PROYECCIÓN ASTRAL

 

La verdadera psicología es, no tanto una ciencia como un estado de realización; de hecho, mucho de lo que pasa por psicología, aún hoy, es fragmentario, y guarda poca semejanza con la realidad.

No obstante, mientras ciertas ramas de la psicología se desvíen a interpretaciones puramente biológicas, animalistas, conductistas, etc. los misterios de la psique no serán conocidos.

La psique es el dominio del Plano Mental y está reflejada en una forma emocional-sensitiva en el Plano Astral. Esto nos afecta al nivel físico, sin embargo nuestra psique existe independientemente de nuestro cuerpo físico y biológico -por lo tanto una interpretación animalística de la actividad psíquica es, en el mejor caso, mínima, aunque no completamen­te sin      fundamento. .

Los sueños generalmente tienen un contenido simbólico, aunque este contenido es algo oscuro a veces. La experiencia de la proyección astral tiene también su aspecto simbólico; de hecho todos los eventos de la vida son simbólicos de una manera u otra, por lo tanto esto no es particularmente sorprendente.

Es posible interpretar los elementos de una proyección en términos sim­bólicos y relacionarlos con condiciones específicas que hemos experimen­tado como individuos durante las encarnaciones físicas. No obstante, esta interpretación puede ser tan errónea como aclaradora. Casi todo lo que experimentamos en el nivel físico es experimentado primero, en esen­cia, en el nivel astral -por tanto no llega a ser tanto, una cuestión de salida cuya experiencia física ha dado lugar a la experiencia astral, sino una experiencia astral que ha ocasionado la experiencia física.

Existe una muy fundamental diferencia aquí, apreciable en la meditación y contemplación. Si nuestras experiencias físicas son representaciones simbólicas de lo que nos sucede en el Plano Astral, se deduce que gran parte de la ciencia de la psicología está en un radio muy alejado.

Antes de que encarnemos somos individuos que tenemos modelos fijos que se han "solidificados" por experiencias y actividades previas –ambas en el plano físico y en otros niveles.

Cuando encarnamos, llevamos esos modelos con nosotros, y ellos deter­minan inmediatamente el tipo de las primeras experiencias que hemos te­nido como niños, incluyendo la clase de ambiente en el que hemos nacido, la clase de padres que hemos elegido y la clase de experiencias que ten­dremos posteriormente -aunque éstas también ser determinadas por la salida de los nuevos modelos causados por el desarrollo de esta vida.

Por tanto, nuestros sueños están probablemente para reflejar no sólo lo que estamos experimentando durante una encarnación dada, sino también situaciones pasadas antes de que esa encarnación sucediera; y similar­mente nuestras experiencias de la proyección astral mezclarán algo de ambos factores también -pero también reflejarán las situaciones que no tienen nada que ver con la vida física; condiciones o situaciones que verdaderamente son sólo concernientes al Plano Astral, al Plano Mental o incluso a los planos Espirituales Superiores.

Todos nosotros vivimos en distintos niveles simultáneamente, y sin em­bargo necesariamente no somos consciente de este hecho muy claramente, todos estos diferentes niveles de actividad intermedia en un lado y en el otro pueden coexistir perfecta y separadamente, a menos que inter­fieran con las experiencias que tenemos en el plano físico.

Inversamente, hay elementos de tu vida física que están muy influencia­dos por tus propias actividades en otros niveles -éstas pueden incluso iniciar ciertas condiciones físicas que nos ayuden a resolver sucesos que están comprometidos en estos otros niveles.

Cuando se trata del Más Allá es difícil hacer definiciones firmes y rápidas tales como, qué influencias hay, y cuando, y para qué propósito, ya que gran parte de lo que somos está obscurecido por el tipo de aten­ción que usamos en nuestra vida normal y diaria. Nuestras personalida­des, tal como las experimentamos en el plano físico, pueden estar influenciadas por aspectos de nosotros mismos viviendo en otros planos, aún cuando durante la proyección astral puede llegar a hacerse claro que nuestras personalidades astrales son diferentes de nuestras perso­nalidades físicas. A pesar de todo, nos experimentamos a nosotros mis­mos como la misma individualidad, sin embargo no experimentamos el mis­mo nivel de inhibiciones, por ejemplo; ni sentiremos que ciertas cosas son imposibles, las cuales podríamos considerar imposibles en el nivel físico. De hecho, tan pronto como estemos en un estado de consciencia proyectado tornan posesión otras "normas", los operadores no se cuestio­nan necesariamente este hecho, sólo lo "sabemos". La adaptación o cam­bio de estado mental es inmediato y automático en la mayoría de los casos; no es una decisión consciente de nuestra parte corno individuali­dades.

Lo que experimentamos de la vida durante la vigilia física es normal­mente tan restringido y mundano que no puede tomarse en consideración con lo que somos o experimentamos en otras dimensiones. La mayor parte del tiempo a penas tratamos con las complejidades del mundo físico, solamente aquellas inherentes a otros. Es sólo al ir creciendo en nues­tra toma de consciencia de estos otros planos cuando nuestras vidas co­mienzan a hacerse más completas y realmente más verdaderamente holís­ticas o sinérgicas.

La forma en la que la experiencia consciente de la proyección astral afecta a nuestra consciencia normal no puede ser valorada en términos simples: cambia todas nuestras vidas, cuestiona todo lo que nos han enseñado u obligado a creer, nos abre un vasto horizonte de posibili­dades en el nivel consciente, hace una absoluta burla de prácticamente todos los dogmas religiosos, por no decir que acaba con ellos.

Comenzamos a sentirnos más libres y más en contacto con lo que realmen­te 'somos'. Lo que todo esto representa en el terreno psicológico es tremendo -estamos experimentando efectivamente un tipo de emancipación que no tiene nada que ver con ideología, política, religión o incluso ciencia -esto esta más allá del "esquema" de sociedad humana, en todas las formas presentes. En el futuro, cuando la Proyección Astral y los Estados Superiores de Consciencia se hayan llegado a reconocer como un hecho, y no una ficción o ilusión, o peor aún, una aberración, llegará a incorporarse en la matriz de los intereses y experiencias sociales, y luego presumiblemente cada uno estará ocupado en ello.

No obstante, si percibimos la vida como simbólica podemos también comenzar a diferenciar los "signos" reales de los falsos -es decir, es­tos signos y en algunos casos "presagios", pueden ser "vistos" intuiti­vamente más que interpretados mental o psicológicamente. A la inversa, uno de los "males" de la Nueva Era es ver significado en absolutamente todo e interpretar cada pequeño aspecto aislado de la vida como categó­ricamente significativo. Esto sería bueno si las interpretaciones que resultaran no fueran usadas después para dispensarse de hacer lo que no merece ninguna mitigación.

Hay un nuevo tipo de "atmósfera psíquica" en los procesos de funciona­miento en esta forma a la superficie consciente. No obstante, aún no está "claro" como nos afectarán las cosas a largo plazo, aún cuando sí podamos hacer predicciones basadas en la lógica o incluso en la intui­ción. La sociedad del siglo próximo será obviamente completamente dife­rente a la cambiante sociedad del s. XX; a pesar de todo sería muy idea­lista en este estadía sugerir que todo será "maravillosamente" armonio­so -indudablemente no será así.

Habiendo dicho esto, la sociedad del siglo XXI deberá ser más sabia y, con optimismo, un poco menos destructiva; habrá abundancia de nuevas preocupaciones, desde la inteligencia artificial a "psi & chips", sin hacer mención a huéspedes de extravagancias científicas -propicios por voca­bularios psiquiómicos, cuerpos clónicos y "mundos en órbitas".

El mundo del siglo XXI podría ser maravilloso... pero ¿de quién es este sueño? ¡¿Nuestro?!.